La Alcaldía asegura que en la reunión con la empresa se habló de las líneas de autobús, pero no se abordó el abono de los 4 millones que supuestamente debe
06.11.12 - 02:32 -
JORGE GARCÍA BADÍA |/ La Verdad
«La reunión tenía por objeto la petición del Ayuntamiento de mejorar el precio de la línea 44 y los horarios de las líneas que unen nuestro municipio con Murcia». Es lo que a juicio del Consistorio de Alcantarilla ocurrió en el encuentro del 30 de octubre, celebrado en la Entidad Pública del Transporte (EPT), y a la que asistieron entre otros, el alcalde Lázaro Mellado; el portavoz municipal, Juan José Gómez Hellín; el gerente de la Entidad Pública del Transporte, Luis Lorente, y el director adjunto de Latbus, Fulgencio Jiménez.
Hasta ahí todo normal, salvo por un pequeño detalle de 4.096.454 euros que no aparecen en todo el comunicado municipal, a pesar de que tras la reunión de marras la empresa de transporte anunció a 'La Verdad' que se había alcanzado un acuerdo para financiar a 'la alemana' la deuda municipal. En concreto, y siempre según Latbus, en un plazo máximo de diez años, entre 2013 y 2023, en el que el Consistorio haría efectiva la primera letra en enero del próximo año. Algo que en principio no va a ocurrir, ya que en la nota de Alcaldía no se menciona el acuerdo anunciado por la empresa. Es más, solo se habla de la deuda en el último párrafo, donde se indica: «Durante la reunión, el representante de Latbus sacó a colación la deuda que, según sus datos, tiene el Ayuntamiento con la empresa, a lo que el alcalde contestó que debían de tratarlo con el área económica y con los servicios jurídicos, encargados de verificar este asunto». Es decir, se produjo una reunión pero cada una de las partes ofrece una versión antagónica de lo que sucedió. Extremo que ha provocado que Latbus arremeta contra el Consistorio.
El director adjunto de la empresa, Fulgencio Jiménez, reconoce que «se habló del precio de la línea 44 y los horarios de las líneas», pero tacha el comunicado municipal de «ejercicio de cinismo superlativo al eludir el pago de la deuda. Ya está bien. Es un ejercicio de cobardía absoluta del alcalde, Lázaro Mellado, aceptar los términos y condiciones de pago de la deuda delante de un alto cargo de la Comunidad Autónoma (el gerente de la EPT, Luis Lorente), y cuando llega el momento de dar explicaciones a los ciudadanos, remitirnos al área económica».
Jiménez advierte de que se reserva «la adopción de las medidas legales que considere oportunas para recibir el justo pago de la deuda generada en quince años».
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