PUERTO LUMBRERAS/ Desalojan cuatro viviendas de La Estación por daños provocados por el agua

Los vecinos creen que la red de saneamiento quedó dañada por las riadas mientras el Consistorio encarga un estudio a la UPCT 

13.01.13 - 00:39 - 

T. M. M. |/ La Verdad

Las consecuencias de la riada de finales de septiembre siguen aflorando a pesar de que ya han transcurrido casi cuatro meses de la tragedia. De nuevo los vecinos del núcleo lumbrerense de La Estación, en la pedanía del Esparragal, son los principales afectados. Más de una decena de viviendas se han llenado de grietas que van en aumento y también en grosor, según afirman los damnificados, que ya se han puesto en manos del Consorcio de Compensación de Seguros. «Nos han dicho que ellos se hacen cargo siempre que no se demuestre que los daños en la cimentación o los pilares están provocados por una mala construcción o por estas las casas ubicadas en un terreno no apto para la construcción», dice Paqui Ortuño.

Entre las posibilidades que los vecinos barajan como causas del deterioro está la posible rotura de una tubería de la red de agua potable que discurre bajo el núcleo de viviendas, lo que estaría provocando que el agua quedara embalsada afectando la humedad a la cimentación. La rotura se habría producido como consecuencia de la presión con la que discurría la masa de agua el día de la riada.

Cámaras en las redes

El Ayuntamiento descarta que la causa esté en la red de saneamiento o en la de abastecimiento. «Desde el primer momento los técnicos han estado en la zona. Se han revisado las redes introduciendo cámaras para cerciorarnos de que no había ninguna rotura, y efectivamente no hay pérdidas. A partir de ahí, hemos contactado con un servicio especializado de la Universidad Politécnica de Cartagena para que haga un estudio de la superficie que ayude a conocer las causas de lo que está ocurriendo.».

Hasta el momento, cuatro viviendas han tenido que ser desalojadas y en una quinta vive un señor que se niega a marcharse. Juan Ramón Cayuela es uno de los desalojados. Se ha tenido que buscar un piso de alquiler. «Yo más que a una tubería rota culpo al terreno. Es muy arenoso y creo que la gran cantidad de agua que se filtró es lo que ha provocado que las estructuras de las casas hayan empezado a ceder. En nuestra casa ya no se puede vivir».