La Verdad
Tres años después de que concluyeran las obras, ya hay fecha de apertura. A lo largo del próximo mes de mayo está previsto que se abra al público el Centro de Visitantes de Monteagudo, junto a la ermita de San Cayetano, una instalación concebida como el punto de partida para la recuperación del conjunto monumental formado por los tres castillos medievales de la época del Rey Lobo: Monteagudo, Larache y Castillejo. Este nuevo recurso turístico del municipio dispondrá, según anunció a 'La Verdad' el concejal de Turismo, Miguel Cascales, de cinco salas en las que los turistas podrán conocer el origen de los primeros pobladores de la comarca. La musealización del complejo se ha iniciado y en este momento se trabaja en la dotación de los contenidos, que girarán en torno a cinco periodos: Calcolítico (Edad del Cobre), Argárico, Ibérico, Romano y Árabe. En cada sala se contemplarán las costumbres funerarias, agrícolas, rituales y urbanísticas de las culturas que habitaron la montaña.
El rey Ibn Mardanish, más conocido como el Rey Lobo, eligió este enclave para establecerse, gobernando desde 1147 hasta 1172. Construyó una línea estratégica defensiva y militar formada por el Castillo de Monteagudo, el Castillejo y el Castillo de Larache.
Alrededor de los baluartes construyó albercas para el regadío, los restos arqueológicos más relevantes del Islam medieval de Murcia, que también se conocerán en San Cayetano.
La Junta Municipal de Monteagudo organiza desde finales de 2012 visitas guiadas para conocer este conjunto histórico-monumental. En la ruta, de algo más de 3 kilómetros, se conocen los castillos y fortalezas y los sistemas de riego y albercas, entre otras cosas, que se construyeron durante el esplendor andalusí.
Las visitas se ofrecen a colegios, institutos y colectivos en general. Los grupos deben ser de 50 personas y para inscribirse hay que rellenar el formulario disponible en la página web www.monteagudo.info
La propuesta y el diseño han sido realizados por la empresa Ecoambiental, en colaboración con Arqueología Estudios y la Junta Municipal de Monteagudo. Según la web, el coste de la actividad es de 75 euros más IVA para grupos de 50 personas. El recorrido es accesible para todos aquellos capaces de caminar y moverse durante tres horas, pues los desniveles son pocos y muy suaves.
Réplicas de los artesanos
Por otro lado, Cascales avanzó que artesanos de la Región están realizando réplicas de las piezas que se encontraron en las excavaciones realizadas en la zona y que en la actualidad están custodiadas en museos. Estas réplicas se exhibirán en el Centro de Visitantes y entre ellas hay armas, ajuares, cerámicas, ornamentos, maquetas y herramientas para la agricultura. Desde el Centro de Visitantes se podrán contemplar las excavaciones de las viviendas argáricas que se encuentran integradas en este espacio. «Todos los trabajos arqueológicos son supervisados por el equipo de profesionales que ha realizado las últimas excavaciones en la zona», manifiesta el concejal.
Esta nueva instalación abrirá para el mes de mayo con la intención de ser un centro abierto y adaptado a las demandas y necesidades de los vecinos. De hecho, la Junta Municipal de Monteagudo, por encargo de la Concejalía de Turismo, colabora en la gestión de las instalaciones.
El Ayuntamiento también ha sacado a contratación el servicio para la contratación de informadores turísticos para el Centro de Visitantes, según informó esta semana el Ayuntamiento, aunque la edil socialista Andrea Garries denunció hace unos días que el Ayuntamiento había dado marcha atrás y anulado el procedimiento convocado a principios de marzo por 75.000 euros. «Ahora, sin mediar explicaciones, nos encontramos que se ha suspendido este concurso por lo que su puesta en funcionamiento se retrasará todavía más», presagiaba la edil Garries.
El anuncio del Gobierno municipal de que ya se han iniciado los trabajo de acondicionamiento de exteriores y la musealización evidencia que los planes para la apertura de San Cayetano estaban ya en marcha, a pesar de los retrasos. El titular de Turismo ya advirtió a finales de 2012 de que no se podrían hacer grandes alardes y que invertirían 100.000 euros, que era la cantidad que venía pagando el Ayuntamiento en sueldos a los empleados del extinto Consorcio Turístico 'Murcia. Cruce de Caminos'.
PROYECTO DE ANDRÉS CÁNOVAS, MARURI Y AMANN
Paisaje artificial: «Por su posición se relaciona con el entorno, completando un paisaje denso y macizado. No es el del entorno, la dispersión de lo contemporáneo, sino el antiguo, el de las cubiertas que se apelmazan densamente, reconstruyendo la falda del monte. Cubiertas planas, terrazas rojizas que hoy se convierten en planimetrías no transitables. El color oxidado tornándose en inflexiones terrosas. Es un plano que construye el paisaje artificial de la ladera del macizo».
Niveles: «Dos niveles claramente diferenciados, planta baja y primera. Espacio público y espacio privado. Hormigón armado y acero. Gris muy claro y corten oscuro. Exterior e interior. Materiales naturales y pinturas artificiales».
Ruinas: «El zócalo de hormigón regulariza el suelo y define otro nivel más artificial. Los muros no cierran volúmenes sino que se colocan como si fueran los rastros de unas ruinas, de la misma familia que los restos que ya debían existir allí».
Objetos: «Abajo el espacio abierto se funde con el espacio público. Extrovertido, horizontal. Esperando a las personas que se sienten y lo llenen de sonidos y movimientos. Serán los protagonistas del espacio. Al contrario que arriba donde el museo es cerrado, volcado sobre sí mismo. Introspectivo. Quieto. Los protagonistas son los objetos».
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