El escultor Ramón Cuenca crea dos imágenes para la cofradía de la Caridad y una de ellas funda una nueva procesión
Ramón Cuenca es joven, pero solo de edad. Con un centenar de imágenes procesionando por toda España, la madurez como escultor la tiene totalmente lograda. En Murcia ya se está haciendo un hueco. Para la Archicofradía de la Sangre, esculpió la imagen de San Vicente, que abre la procesión del Miércoles Santo, y el soldado de El Pretorio. También es autor del Cristo de Medinacelli. Su año, sin duda, ha sido éste, con la realización de dos nuevas imágenes para La Caridad: Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos y San Juan.
La imagen de Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos trata de representar el dolor y la amargura de una madre que ha perdido a su hijo y que, además, anhela la resurrección prometida. «Está arrodillada porque está meditando en sus misterios dolorosos, en soledad», asegura el escultor. «Además, este modelo iconográfico de una Virgen orante ya existía en la Semana Santa murciana, pero se perdió y esto ha sido una manera de recuperarlo».
Cuenca reconoce que ha sido un proyecto muy ilusionante, porque ha fundado un nuevo cortejo procesional «con una estética muy definida». Sostiene que ha sido un reto importante. «Para esculpir una Virgen hay que tener en cuenta que debe ser guapa, transmitir congoja, tener carisma, ser fina, elegante, delicada y madura». A pesar de estas dificultades, Cuenca está muy satisfecho con el proyecto, al igual que la cofradía. «Fue un éxito por la estética y a los cofrades les gustó mucho. Ahora falta ver la puesta en escena cuando salga en la procesión».
San Juan no es nuevo, sustituye a otra imagen de la cofradía, pero tampoco ha dejado indiferente a nadie. «Sabía que la imagen iba a estar, durante todo el año, a los pies de la cruz, cerca del altar, por eso me planteé un San Juan diferente, una imagen que dirige la mirada hacia arriba, mirando a Cristo crucificado, llorando, con una lágrima cayéndole en la mejilla». Una novedad satisfactoria. «Varios cofrades me dijeron: 'Éste es nuestro San Juan'».
Ramón Cuenca espera con impaciencia ver sus nuevas imágenes procesionando «porque es un reto muy grande trabajar para la Semana Santa de Salzillo». Mientras, trabaja en otros proyectos para otras ciudades. Su relación con la semana pasional es honda. Es el presidente del Cabildo de la localidad alicantina de Cox y miembro de la cofradía de Jesús Cautivo y María Santísima de la Paz de ese municipio. Reconoce que la Semana Santa murciana es «maravillosa, con raíces muy hondas, señera en el panorama nacional e internacional».
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