El Pleno rechaza las alegaciones presentadas y da luz verde al convenio de la fundación
31.05.09 -
A. S. LORCA/ La Verdad
El penúltimo obstáculo para que el proyecto de la Fundación Poncemar para el desarrollo urbanístico de la zona situada frente a la explanada de la estación de autobuses, de la que es el propietario mayoritario, ha quedado eliminado tras el acuerdo del Pleno de la corporación municipal en repuesta a las alegaciones presentadas por el otro propietario de los terrenos, la mercantil Eusebio Abellán, S. L. al texto del convenio entre el Ayuntamiento y Poncemar
En la sesión ordinaria del viernes fueron rechazadas las alegaciones que, según manifestó ayer el alcalde, Francisco Jódar, se referían a un error en el texto del convenio, por lo que pedía su nulidad. «El convenio no se había firmado todavía y lo que hemos hecho es corregir ese pequeño error y aprobar el texto definitivo que rubricaremos ambas partes en los próximos días», aclaró Jódar.
A partir de ese momento y en cuanto el Plan Parcial correspondiente esté aprobado definitivamente, se pondrá en marcha la operación de desarrollo urbanístico prevista. Antes, hay dos problemas que resolver, el traslado de la actual plaza de abastos, que se verá afectada de forma directa puesto que está en terrenos de Poncemar, y las dependencias de la Concejalía de Empleo que también ocupan edificios de la fundación que será necesario derribar.
Para el alcalde, el tema de la concejalía no es problema puesto que hay disponibles un edifico para el Centro de Desarrollo Local en la alameda de Cervantes y el complejo de talleres de Torrecilla. En cuanto a la plaza reconoció ayer que se seguía en la búsqueda de una solución provisional y «estamos barajando varios lugares que podrían ser adecuados, pero es un tema que todavía está en el aire».
Lo que quiere Poncemar
El solar frente a la estación de autobuses, el conocido como Plan Especial de Reforma Interior (PERI) de la Fundación Poncemar, está diseñado para acoger un gran aparcamiento subterráneo de cinco plantas y dos bloques de viviendas, uno de quince alturas, y el otro de siete. También se situaría en la misma parcela una galería comercial donde se podría ubicar una firma nacional.
La mayor parte del perímetro estará ocupado por una gran glorieta presidida por la vieja chimenea de ladrillo visto que será lo único de las construcciones actuales que se mantendrá, una vez restaurada. Las bocas de entrada al parking subterráneo estarán en la alameda de Menchirón y frente a la estación de autobuses.
El pasado mes de enero ya el Plano municipal adoptó diferentes acuerdos en relación con el borrador de convenio que era necesario para la obtención de un aparcamiento de uso público y un equipamiento comercial. El acuerdo fue aprobado, por lo que el proyecto siguió su curso, sin que desde entonces la fundación haya presentado de forma oficial los detalles del proyecto, aunque existe una recreación fotográfica de cómo podría quedar la zona si, al final, Poncemar y el Ayuntamiento confirman ese anteproyecto.
El mayor edificio estaría junto a la trasera de un bloque de viviendas de la alameda de Cervantes. Junto a él, otro menor, que marcará línea con otros existentes que configuran la parte trasera de la avenida de Juan Carlos I. Delante, junto a la Alameda de Menchirón quedaría una plaza de unos 6.000 metros cuadrados.
31.05.09 -
A. S. LORCA/ La Verdad
El penúltimo obstáculo para que el proyecto de la Fundación Poncemar para el desarrollo urbanístico de la zona situada frente a la explanada de la estación de autobuses, de la que es el propietario mayoritario, ha quedado eliminado tras el acuerdo del Pleno de la corporación municipal en repuesta a las alegaciones presentadas por el otro propietario de los terrenos, la mercantil Eusebio Abellán, S. L. al texto del convenio entre el Ayuntamiento y Poncemar
En la sesión ordinaria del viernes fueron rechazadas las alegaciones que, según manifestó ayer el alcalde, Francisco Jódar, se referían a un error en el texto del convenio, por lo que pedía su nulidad. «El convenio no se había firmado todavía y lo que hemos hecho es corregir ese pequeño error y aprobar el texto definitivo que rubricaremos ambas partes en los próximos días», aclaró Jódar.
A partir de ese momento y en cuanto el Plan Parcial correspondiente esté aprobado definitivamente, se pondrá en marcha la operación de desarrollo urbanístico prevista. Antes, hay dos problemas que resolver, el traslado de la actual plaza de abastos, que se verá afectada de forma directa puesto que está en terrenos de Poncemar, y las dependencias de la Concejalía de Empleo que también ocupan edificios de la fundación que será necesario derribar.
Para el alcalde, el tema de la concejalía no es problema puesto que hay disponibles un edifico para el Centro de Desarrollo Local en la alameda de Cervantes y el complejo de talleres de Torrecilla. En cuanto a la plaza reconoció ayer que se seguía en la búsqueda de una solución provisional y «estamos barajando varios lugares que podrían ser adecuados, pero es un tema que todavía está en el aire».
Lo que quiere Poncemar
El solar frente a la estación de autobuses, el conocido como Plan Especial de Reforma Interior (PERI) de la Fundación Poncemar, está diseñado para acoger un gran aparcamiento subterráneo de cinco plantas y dos bloques de viviendas, uno de quince alturas, y el otro de siete. También se situaría en la misma parcela una galería comercial donde se podría ubicar una firma nacional.
La mayor parte del perímetro estará ocupado por una gran glorieta presidida por la vieja chimenea de ladrillo visto que será lo único de las construcciones actuales que se mantendrá, una vez restaurada. Las bocas de entrada al parking subterráneo estarán en la alameda de Menchirón y frente a la estación de autobuses.
El pasado mes de enero ya el Plano municipal adoptó diferentes acuerdos en relación con el borrador de convenio que era necesario para la obtención de un aparcamiento de uso público y un equipamiento comercial. El acuerdo fue aprobado, por lo que el proyecto siguió su curso, sin que desde entonces la fundación haya presentado de forma oficial los detalles del proyecto, aunque existe una recreación fotográfica de cómo podría quedar la zona si, al final, Poncemar y el Ayuntamiento confirman ese anteproyecto.
El mayor edificio estaría junto a la trasera de un bloque de viviendas de la alameda de Cervantes. Junto a él, otro menor, que marcará línea con otros existentes que configuran la parte trasera de la avenida de Juan Carlos I. Delante, junto a la Alameda de Menchirón quedaría una plaza de unos 6.000 metros cuadrados.
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