Entregan las llaves de 24 casas de alquiler en la nueva barriada de San Gil
04.01.11 - 01:02 -
Aunque la rehabilitación urbanística de San Gil se ha ido desarrollando en distintas fases desde 2007, el acto celebrado ayer se convirtió de hecho en una inauguración oficial. Lo fue no sólo por el descubrimiento de una placa, sino por la importante presencia de autoridades locales, regionales y nacionales que se dieron cita en esta antaño barriada degradada, por muchos considerada un auténtico gueto.
Al acto, asistieron, entre otros, el alcalde del municipio, Francisco Bernabé; el consejero de Obras Públicas, José Ballesta; el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar; el director general de la Sociedad Estatal de Suelo (Sepes), Pedro Saura; y concejales de PP e IU.
El acto propiamente dicho consistió en la entrega de llaves de las últimas 24 viviendas -de 60- que quedaban por rehabilitar en el marco del convenio de Área de Rehabilitación Integral (ARI) firmado por el Gobierno Central, Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento. Como en anteriores ocasiones, los vecinos de la barriada manifestaron su alegría efusivamente después de escuchar cada uno de los discursos (Bernabé, Ballesta, y González Tovar por este orden), en los que enfatizaron «la satisfacción política y personal» y el «ejemplo de coordinación entre administraciones para sacar adelante proyectos sociales como éste».
Las 60 familias beneficiadas por esta actuación, en su mayoría de etnia gitana, deberán pagar un alquiler en función de sus ingresos al propietario de la urbanización, el Instituto de Vivienda y Suelo de la Región (IVS), dependiente de la Consejería de Obras Públicas. La mensualidad, según fuentes municipales, oscila entre 15 y 90 euros.
Apenas hubo referencias en público acerca de la obligación de los inquilinos de mantener en condiciones las nuevas casas, pero diversas autoridades confirmaron a 'La Verdad' que habrá «tolerancia cero» con la dejadez o destrozos que pudieran ocasionarse. Y es que en la memoria de muchos vecinos de La Unión todavía está aquella jornada de principios de los 80, como la de ayer, en que se inauguraba la flamante barriada, y que a los pocos años ya estaba considerada como 'marginal'.
De todas formas, las obras de recuperación de la urbanización finalizarán dentro de unas semanas, cuando la Consejería licite y ejecute el derribo de uno de los dos bloques declarado en ruinas. El primero ya fue demolido en 2009. Entre los dos, suman 92 viviendas.
La inversión global en este programa de rehabilitación ha sido de 3,5 millones de euros, aportados en un 10% por el Ejecutivo Central y el resto por la Comunidad Autónoma. De este montante, se han destinado aproximadamente 3.170.000 euros a rehabilitación y demolición y los 330.000 euros restantes a la renovación integral de la Avenida de San Gil.
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