Los sindicatos de la Policía Local dicen que mantendrán la presión y Alarte les acusa de excederse con las multas
17.02.12 - 01:32 -
ALEXIA SALAS |/ la Verdad
«Esto es duro, es todo un marronazo, nunca mejor dicho, pero no me echo atrás», afirmaba ayer el concejal de Seguridad y Personal, José Manuel Alarte, sobre el acto de vandalismo que sufrió en su propia casa, cuya fachada encontró el sábado embadurnada de excrementos. La Guardia Civil sigue la investigación para esclarecer a los autores, aunque fuentes cercanas aseguraron que la Benemérita no recogió muestras de las heces para averiguar su procedencia.
Alarte, cirujano gastroenterólogo de profesión, bromeó ayer sobre la situación: «Si averiguamos quién fue, le aconsejaré un test de heces porque debe tener gastroenteritis».
El edil se mantiene firme en el enfrentamiento abierto con la plantilla de la Policía local por los recortes aplicados por el Plan de Empleo. Los agentes terminaron de registrar ayer las denuncias de 41 policías contra su concejal directo por conducir un coche policial con las luces de emergencia encendidas y hablando por el móvil en la cabalgata de Reyes.
Los policías decidieron ayer pedir la dimisión del concejal, lo que pretenden formalizar en los próximos días en el Registro municipal. Decidieron además renunciar a la paga de bajo absentismo que cobran los funcionarios.
Los agentes no quieren ya percibir esa remuneración extra -dos pagas más al año- y han respondido que los móviles que tienen para contactar con los compañeros los entregarán en cuanto se los pidan.
El PSOE también le pedirá al edil que se marche en el próximo Pleno. «No está preparado para esta responsabilidad y, desde que llegó, el ambiente de disgusto se ha extendido entre los empleados», indicó ayer el portavoz del PSOE, José Ángel Noguera. Noguera critica que el plan se aplica «de forma discriminatoria, ya que las 37 horas sólo las están haciendo los funcionarios del edificio consistorial, pero no la Policía ni el resto».
Huelga a la japonesa
Alarte asegura que no dará marcha atrás y «mantendré las vías de negociación abiertas, pero también tenemos que exigir a la Policía que haga su trabajo». El concejal les acusa de hacer huelgas a la japonesa para aumentar la presión contra él. «Lo hacen en La Ribera, ponen multas por un centímetro que salga el coche de la raya, de manera que en la fiesta de San Blas tuvimos que ir el alcalde y yo a decirles que preservaran las buenas relaciones y que no denunciaran a coches que no molestan».
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