EFE
La Audiencia Provincial de Murcia ha ordenado al Juzgado de Instrucción número 2 de Mula que investigue si el club de fútbol muleño cometió un delito de estafa al no entregar el coche que había sorteado en una rifa a la persona que resultó ganadora del mismo. La sentencia, que lleva fecha de 14 de julio y ha sido dada a conocer ahora, anula el archivo decretado por el juez, al que ordene que tome declaración como imputado al presidente de la citada entidad deportiva «a fin de que aclare los extremos que sean pertinentes para el esclarecimiento de los hechos denunciados», afirma el auto.
Añade el tribunal que tras prestar declaración, el juzgado deberá practicar cuantas diligencias considere oportunas «para precisar la presunta actividad delictiva que pudiera haberse cometido». La resolución de la Audiencia, de la que ha sido ponente el magistrado Juan del Olmo, señala que la mujer que ganó el premio presentó la oportuna denuncia al ver que pasaban cuatro meses desde el sorteo y no se le entregaba el vehículo.
«Los boletos supuestamente vendidos», comenta la Audiencia, «de atender al número de la papeleta agraciada -la 7.062- supondría unos ingresos elevados de miles de euros, que, en todo caso, superarían con creces el valor supuestamente del vehículo ofrecido, que era de unos 7.000 euros, por lo que no se vislumbra una razón que pueda amparar la no entrega del mismo o del equivalente en dinero». De ahí, que el juez ordene seguir investigando
La Audiencia Provincial de Murcia ha ordenado al Juzgado de Instrucción número 2 de Mula que investigue si el club de fútbol muleño cometió un delito de estafa al no entregar el coche que había sorteado en una rifa a la persona que resultó ganadora del mismo. La sentencia, que lleva fecha de 14 de julio y ha sido dada a conocer ahora, anula el archivo decretado por el juez, al que ordene que tome declaración como imputado al presidente de la citada entidad deportiva «a fin de que aclare los extremos que sean pertinentes para el esclarecimiento de los hechos denunciados», afirma el auto.
Añade el tribunal que tras prestar declaración, el juzgado deberá practicar cuantas diligencias considere oportunas «para precisar la presunta actividad delictiva que pudiera haberse cometido». La resolución de la Audiencia, de la que ha sido ponente el magistrado Juan del Olmo, señala que la mujer que ganó el premio presentó la oportuna denuncia al ver que pasaban cuatro meses desde el sorteo y no se le entregaba el vehículo.
«Los boletos supuestamente vendidos», comenta la Audiencia, «de atender al número de la papeleta agraciada -la 7.062- supondría unos ingresos elevados de miles de euros, que, en todo caso, superarían con creces el valor supuestamente del vehículo ofrecido, que era de unos 7.000 euros, por lo que no se vislumbra una razón que pueda amparar la no entrega del mismo o del equivalente en dinero». De ahí, que el juez ordene seguir investigando
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