miércoles, 8 de septiembre de 2010

MURCIA/ Unidos por el fuego de la amistad


El encendido de la Antorcha da el pistoletazo de salida al Festival Internacional de Folclore en el Mediterráneo

08.09.10 - 01:12 - MARÍA DOLORES DE LA VIEJA mariadoloresdelav@msn.com MURCIA.



Los gigantes y cabezudos de ' El Tío Pajero', de Abarán, junto a los grupos participantes en el Festival Internacional de Folclore, pusieron ayer la nota de alegría y color en las calles y plazas de la ciudad. Los viandantes que veían asombrados el desfile de los grupos, aplaudían a los jóvenes bailarines u observaban los variados detalles de sus indumentarias folclóricas.
Los gigantes y cabezudos es una tradición de Abarán que ha tenido un profundo calado en la localidad, desde que el llamado 'Tío Pajero', que no era más que un vecino que vendía paja y pienso para los animales, fue operado en un Hospital de Madrid, por los años 50, y volvió al pueblo con unas cabezas de cartón que le habían regalado. Su presencia en el Festival de Folclore es una forma de dar a conocer y difundir las peculiaridades tradicionales de los distintos pueblos de la Región. Cada año es un festejo distinto el que participa en el Festival.
En la plaza de Santo Domingo, tal y como estaba previsto, se procedió a la tradicional ceremonia de encendido de la Antorcha de la Amistad, llama que simboliza la unión entre los pueblos a través de la música y el folclore, y que sirve de pórtico a las sesiones del Festival y demás actividades paralelas.
El alcalde de la ciudad, Miguel Ángel Cámara, junto al director del Certamen, Manolo Fernández Delgado, entregaron la antorcha portátil con la llama de la Amistad a los representantes del grupo murciano Francisco Salzillo y luego fue pasando de grupo en grupo, hasta que finalmente volvió a las manos del alcalde y de Fernández Delgado, que se la entregaron a sendos representantes de los grupos murcianos Virgen de la Vega, Francisco Salzillo y Siete Coronas, que fueron los encargados de encender el gran pebetero central.
Después se procedió al izado de banderas de los países participantes y de la Región, Murcia, Festival, y de la Paz, en un emotivo acto que fue coronado con el Himno a Murcia, interpretado por el Orfeón Fernández Caballero, bajo la dirección de Margarita Muñoz.
Durante la ceremonia se tributó un cálido aplauso en memoria de Carlos Valcárcel Mavor, fallecido hace unos meses y que fue el segundo director que tuvo el certamen folclórico.
Después se organizó un alegre pasacalles, encabezado por Eladio y Cirila, una pareja de gigantones huertanos, seguidos por otro gigante vestido de boxeador y por el Gordo y el Flaco, también pertenecientes a la comparsa de Abarán. Las bandas de gaiteros Mazikandu y Cantiga 169, les dieron escolta, seguidos por los grupos folclóricos, en los que destacaban los vistosos trajes de las extremeñas, y la alegría caribeña del grupo de Cuba, el exotismo de Kenia, la dulzura hispana del grupo panameño y el mágico encanto de los israelíes . De los grupos murcianos sólo el Siete Coronas lució la indumentaria de lujo, aunque hubiera sido un buen momento para que todos sacaran del arca sus indumentarias más vistosas. Esta noche en la plaza de la Universidad, será la primera sesión del Festival. Previamente, desde las 19.30 horas, las plazas de Belluga, San Bartolomé y Santo Domingo se verán inundadas por la alegría y el colorido de los grupos participantes en la 43 edición del Festival.

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