Morente. Eurovillas VI
Residencial Nuevo
Principado.
Información hecha pública por representantes del equipo de
gobierno local pone de relieve la buena salud de las cuentas municipales. Un
remanente de tesorería de unos cinco millones de euros es el mejor síntoma.
Como las cuentas están saliendo según las previsiones, hay que pregonarlo a los
cuatro vientos. Los medios de comunicación están obligados a recoger y transmitir
la buena nueva. La situación actual permite, desde el punto de vista
presupuestario, acometer inversiones y atender gastos. Como, al fin y a la postre, la consecución de
objetivos en la contabilidad local es fruto del esfuerzo de los ciudadanos, a base
de apretarse el cinturón (y más cosas), tal vez haya llegado el momento de
prestar un poco de atención a todo aquello que lleva mucho tiempo esperando.
Esperando y deteriorándose progresivamente. Quienes en su día invirtieron en
viviendas, en los edificios que flanquean el Paseo Río Nalón, y cuantos
apetecen disfrutar en ese espacio público, no pueden presumir como lo hacen los
políticos de turno, sino lamentarse del cambio de uso y expolio soportados,
especialmente durante los dos últimos años, en que las arcas municipales vienen ingresando el producto de la venta
(dicen, parece ser que con sorna: ocupación temporal) de un suelo que es de todos.
Lo que parecían simples ventas de suelo (calle) a cambio de
platos de lentejas, pan para hoy y hambre para mañana, se ha consolidado como
el negocio más lucrativo de una zona que empezó por llamarse paseo, para ser
luego comedor y, en la actualidad, de todo, incluso trastero. Un negocio que
supera incluso el de las decenas de restaurantes (adosados, pareados,
apretados) que consiguieron que un paseo se quedase sin bancos, una de las
señas de identidad de un municipio
Re-typical. Tal cantidad de mesas, sillas, vallas, tenderetes, estructuras,
etc. se dan cita en ese espacio, que se ha limitado la circulación peatonal a
un pasillo central de 4
metros de ancho (de los 25 que tiene el paseo), del que
no podrán salirse los peatones para no invadir las “terrazas”. Terrazas que, a
la vista de lo que se permite hacer en ellas, son de propiedad particular. Pues
bien, la venta de vía pública es una de las fuentes que nutren las arcas
municipales (presumen de tesorería) en la misma proporción que vacían los
bolsillos (el patrimonio) de los compradores de viviendas, cuya inversión se ha
depreciado tanto como el medio ambiente, la estética urbana, la paz ciudadana,
el descanso domiciliario y el derecho al silencio. Los responsables municipales,
lejos de sonrojarse, sacan pecho por cumplimiento de objetivos. Vivir para ver.
Mejor dicho, mirar para otro lado y así no ver.
Los ciudadanos que conocen bien la situación del “Río”
Nalón, sus afluentes (en especial el Arangüín) y demás cuenca hidrográfica
alcazareña, y se ven forzados a vivir/convivir en Little Britain, Little England,…Murcian
Beirut, permanecen en espera de comprobar qué cantidad se destina a sus
calles (del remanente de tesorería) para obras, pequeñas obras, que llevan años esperando, como el arreglo de aceras, cuyo pésimo y peligroso
estado confirma día tras día la inexistencia de un plan de prevención de
riesgos y accidentes en la vía pública. De momento, mejor callar que
presumir.
Los Alcázares News
es el mejor archivo histórico para informarse sobre el deterioro
progresivo y oficialmente consentido de un espacio urbano: Residencial Nuevo Principado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario