PSOE Abanilla
El PP viene creando impuestos insostenibles a los más inocentes de la deuda municipal para arreglar la insolvencia creada en estos 24 años de despilfarro popular
Tras la aprobación unilateral por parte del PP este pasado lunes 20 en el Pleno Extraordinario del incremento de las tasas del agua y del alcantarillado en las que entre otras se sube la cuota del servicio doméstico en un 76,12%, la industrial en un 80% y el alcantarillado un 39,47%, desde el PSOE de Abanilla queremos trasladarles a nuestros vecinos nuestro rechazo a esta subida de tasas porque sólo viene a intentar resolver los problemas provocados por su despilfarro.
Así, el portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Cutillas, quiso manifestar que "esta subida viene muy mal en estos tiempos de crisis por la situación de necesidad por la que pasan muchas familias, y desde luego es un muy mal regalo navideño del alcalde a sus vecinos". En el Pleno, recordó que "pidió que en vez de liquidar y facturar el cobro cada tres meses, se haga una liquidación mensual, pues como se hace ahora mismo al final el montante es superior". Es más, en el Pleno no se llevó ningún informe técnico que argumentara dicha subida repercutida desde la Mancomunidad de Canales del Taibilla, pero se le recordó al Alcalde que el contrato con la empresa concesionaria Aquagest que terminaba en 2003 se renovó varios años antes por 25 años más, hasta 2028, con la excusa de que la empresa iba a hacer un pozo en la Cañada del Trigo para llevar a las pedanías altas agua desde allí, y querían tener asegurado el contrato para afrontar el gasto de las mismas. Y desde entonces no hemos vuelto a oír hablar de dicho pozo ni de su agua.
Cutillas añadió que "el PP ha perdido de nuevo una oportunidad para hacer una reforma de los impuestos de forma consensuada con las demás fuerzas políticas del pueblo, la cual dote de estabilidad en el tiempo a las medidas fiscales del municipio. Sin embargo el alcalde (y su equipo de gobierno), han preferido caer en la improvisación y el expolio a los ciudadanos sin tener la más mínima sensibilidad hacia las circunstancias particulares de cada vecino".
Con estas acciones, el PP de Abanilla demuestra una vez más que tiene dos varas de medir, pues si bien en su ideario regional dicen que hay que bajar los impuestos, limitar los incrementos de precios y tasas reguladas, en Abanilla quieren salir de la crisis no pagando a las empresas y exprimiendo cada vez más a los ciudadanos, lo que conlleva a la reducción del consumo y la actividad económica local.
Mientras el PP nacional pide que se "adelgace" a las administraciones, aquí con el PP de Abanilla lo único que adelgaza es el bolsillo de los abanilleros, pues desde hace ya varios años llevamos viendo cómo cada cierto tiempo se crean tasas mediante ordenanzas para modificar la tasa del IBI, para retirar vehículos de la vía pública, para meterlos a cocheras a través de aceras y vías, para expedir documentos administrativos, y ahora esta última subida del agua y el alcantarillado, por no recordar la desproporcionada tasa de prestación de servicios urbanísticos que pusieron principalmente para recoger dinero de los nuevos promotores de los convenios y de la que el alcalde les eximió posteriormente y ahora sólo pagamos los abanilleros.
Por estas razones José Antonio Cutillas, manifiesta que "el PSOE, no puede apoyar y de hecho no apoya, que el alcalde le llame a esto "ejercicio de responsabilidad" cuando esto no es más que un simple ejercicio de su incompetencia la cual él se niega a asumir". Por eso Cutillas entiende que "dado nuestro compromiso ético, humano y político con los más desfavorecidos, optamos por la progresividad económica para que se tengan en cuenta las rentas más bajas, y el PSOE, como partido responsable y con vocación de gobierno que es, no se quiere quedar en la crítica demagógica fácil y populista, sino que plantea alternativas progresistas y solidarias", y por eso anuncia que en el programa electoral de las próximas elecciones, "propondrá cambiar el sistema actual por un impuesto que sea progresivo el cual mediante un factor de corrección, se tenga en cuenta la renta y el número de personas que conviven en cada vivienda, pues lo contrario supone perseguir fiscalmente a las familias numerosas".
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