El Ayuntamiento rechaza todas las alegaciones al traslado presentadas por los comerciantes14.07.09 -
DANIEL VIDAL MURCIA/ La Verdad
Deberán desmontar sus puestos, hacer el hatillo y emigrar cerca del río. Concretamente, al Paseo del Malecón, el lugar elegido por el Ayuntamiento de Murcia para que los comerciantes de San Esteban -llamados hippis por el vulgo- trasladen sus pequeños negocios de artesanía. Al menos, mientras continúen las excavaciones arqueológicas que se están realizando con motivo de la construcción del aparcamiento subterráneo. Ya no hay vuelta atrás. El Ayuntamiento ha rechazado todas las alegaciones al proyecto presentadas el mes pasado por los vendedores de este mercadillo artesanal, representados por Manuel Bielsa. Entre esas alegaciones se encontraban, tal y como publicó en su día La Verdad, «el rechazo al traslado provisional al paseo del Malecón, por entender que está fuera de la ruta comercial a la que pertenecen y que no allí no cuentan con seguridad adecuada; una ordenación específica de este mercadillo; proponer como destino provisional el contorno del parking y mantener conversaciones con el alcalde para negociar diferentes puntos», según aseguró en su día el propio Bielsa.
Pero el movimiento de ficha que realizaron los vendedores no ha salido nada bien. Para empezar, le han revocado la licencia a uno de ellos y les da cuatro días de plazo al resto, del 20 al 24 de julio, hasta las 14.00 horas, para que hagan el traslado al Malecón, en horario de 9 de la mañana a 2 de la tarde. De no ser así, el Ayuntamiento advierte de que «se entenderá que el interesado renuncia al realojo». Asimismo, «transcurrido el plazo concedido sin que se haya dado cumplimiento a la orden de retirada y desmontaje, se procederá a retirar el mobiliario, los enseres, los artículos y cuantos elementos se encuentren en la caseta para su traslado y depósito pertinente en los almacenes municipales».
Pero la cosa no se queda ahí. Si eso sucede, «el interesado asumirá los costes de la ejecución que han sido cuantificados provisionalmente, y sin perjuicio de la liquidación definitiva, en la cantidad de 870 euros». Si transcurre un mes desde el depósito de las pertenencias sin que se efectúe la retirada, «los enseres se trasladarán al vertedero municipal para su destrucción». Es decir, o se trasladan, o se trasladan, aunque los comerciantes aún pueden presentar un recurso a esta resolución.
Los motivos
En la notificación enviada ya a 34 de los 56 titulares de licencias, se especifica, en primer lugar, y en base a un informe técnico, que la Concejalía de Descentralización y Mercados considera que «no se puede acceder a la petición de la ocupación parcial de la calle Jerónimo de Roda dado que el espacio solicitado para la reubicación constituye una zona afectada a operaciones de suministros necesarios para ejecutar la obra». También se desoyen las protestas de los comerciantes por la «poca seguridad» del Malecón, ya que «se encuentra prevista la instalación de cámaras de videovigilancia 24 horas y postes de conexión telefónica directa con la Policía Local», según la Concejalía. Asimismo, se rechazan las alegaciones relacionadas «en relación a la idoneidad del mobiliario y equipamiento que será puesto a disposición a los interesados, puesto que las dimensiones y características del citado equipamiento son similares al actual».
También está en desacuerdo el Ayuntamiento con las alegaciones referentes a la higiene del emplazamiento y a las indemnizaciones por los «presuntos daños y perjuicios». En el primero de los casos, el Consistorio asegura que «se van a instalar tres aseos portátiles». En lo referente a las indemnizaciones exigidas por los vendedores, el Ayuntamiento se remite a la «doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo, en cuanto a que la autorización por la que se habilita a realizar un uso especial de dominio público es discrecional y revocable sin indemnización alguna para su titular cuando concurran razones de interés público debidamente justificadas».
La resolución de la Concejalía de Descentralización y Mercados -basada en diferentes informes técnicos- establece que, a partir del día 20, a los interesados se les extenderá -cuando se trasladen a su nuevo emplazamiento- «la oportuna acta de recepción de equipamientos y entrega de llaves».
La cuenta atrás empieza el próximo lunes, día 20.
Pero el movimiento de ficha que realizaron los vendedores no ha salido nada bien. Para empezar, le han revocado la licencia a uno de ellos y les da cuatro días de plazo al resto, del 20 al 24 de julio, hasta las 14.00 horas, para que hagan el traslado al Malecón, en horario de 9 de la mañana a 2 de la tarde. De no ser así, el Ayuntamiento advierte de que «se entenderá que el interesado renuncia al realojo». Asimismo, «transcurrido el plazo concedido sin que se haya dado cumplimiento a la orden de retirada y desmontaje, se procederá a retirar el mobiliario, los enseres, los artículos y cuantos elementos se encuentren en la caseta para su traslado y depósito pertinente en los almacenes municipales».
Pero la cosa no se queda ahí. Si eso sucede, «el interesado asumirá los costes de la ejecución que han sido cuantificados provisionalmente, y sin perjuicio de la liquidación definitiva, en la cantidad de 870 euros». Si transcurre un mes desde el depósito de las pertenencias sin que se efectúe la retirada, «los enseres se trasladarán al vertedero municipal para su destrucción». Es decir, o se trasladan, o se trasladan, aunque los comerciantes aún pueden presentar un recurso a esta resolución.
Los motivos
En la notificación enviada ya a 34 de los 56 titulares de licencias, se especifica, en primer lugar, y en base a un informe técnico, que la Concejalía de Descentralización y Mercados considera que «no se puede acceder a la petición de la ocupación parcial de la calle Jerónimo de Roda dado que el espacio solicitado para la reubicación constituye una zona afectada a operaciones de suministros necesarios para ejecutar la obra». También se desoyen las protestas de los comerciantes por la «poca seguridad» del Malecón, ya que «se encuentra prevista la instalación de cámaras de videovigilancia 24 horas y postes de conexión telefónica directa con la Policía Local», según la Concejalía. Asimismo, se rechazan las alegaciones relacionadas «en relación a la idoneidad del mobiliario y equipamiento que será puesto a disposición a los interesados, puesto que las dimensiones y características del citado equipamiento son similares al actual».
También está en desacuerdo el Ayuntamiento con las alegaciones referentes a la higiene del emplazamiento y a las indemnizaciones por los «presuntos daños y perjuicios». En el primero de los casos, el Consistorio asegura que «se van a instalar tres aseos portátiles». En lo referente a las indemnizaciones exigidas por los vendedores, el Ayuntamiento se remite a la «doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo, en cuanto a que la autorización por la que se habilita a realizar un uso especial de dominio público es discrecional y revocable sin indemnización alguna para su titular cuando concurran razones de interés público debidamente justificadas».
La resolución de la Concejalía de Descentralización y Mercados -basada en diferentes informes técnicos- establece que, a partir del día 20, a los interesados se les extenderá -cuando se trasladen a su nuevo emplazamiento- «la oportuna acta de recepción de equipamientos y entrega de llaves».
La cuenta atrás empieza el próximo lunes, día 20.
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