Las víctimas, de 26 y 30 años, celebraban un cumpleaños en una finca de Cabezo de Torres cuando sufrieron una grave intoxicación
19.04.11 - 02:02 -
Su objetivo era pasarlo lo mejor posible... pero nada más lejos de la realidad. Dos jóvenes entraron en coma este domingo tras ingerir éxtasis líquido (GHB) y bebidas alcohólicas en el transcurso de una fiesta de cumpleaños en un chalé de la pedanía murciana de Cabezo de Torres. Los dos afectados ingresaron en estado de coma en los hospitales Morales Meseguer y Virgen de la Arrixaca de Murcia. Sin embargo, según confirmó ayer la Consejería de Sanidad, los jóvenes evolucionaban favorablemente y en breve se produciría su traslado a planta.
Las drogas transformaron un fin de semana de celebración en un descenso a los infiernos. Este grupo de jóvenes -que algunos vecinos cifraban en cercano al medio centenar- había alquilado una finca ubicada en el carril Antoneles de Cabezo de Torres para festejar un cumpleaños. Esta pequeña vivienda, rodeada de palmeras y con una piscina, se oferta por Internet, según explicaron ayer los vecinos, para celebraciones de todo tipo: cumpleaños, bautizos... «Están todos los fines de semana de traca», explicaba ayer Paco Sánchez, vecino de una casa cercana a esta finca. «Hay días que la fiesta dura hasta las cinco o las seis de la madrugada y es para taparse los oídos», comentaba Ángel Roda, otro residente de este carril.
La celebración de fiestas en este chalé es un secreto a voces en la pedanía murciana. Según explicaron los vecinos, estas celebraciones se prolongan a veces hasta tan tarde que, en algunas ocasiones, ha sido necesaria la presencia policial en la zona. «Alguna vez se ha llamado a la Policía, pero lo cierto es que cuando se les ha pedido que paren, han parado», confesaba Roda.
Según aclararon algunos vecinos de la zona, los jóvenes debían de llevar de fiesta en el chalé desde el viernes por la noche. Según confesarían poco después a los servicios de emergencias, celebraban por todo lo alto un cumpleaños. El domingo a mediodía, la juerga aún no había tocado a su fin. «Yo me levanté el domingo a las siete de la mañana para ir a cortar leña y entonces oí que apagaban un rato la música», relataba Sánchez. «Sobre las once de la mañana la volvieron a poner otra vez, pero esta vez ya más flojita».
Los problemas surgieron en torno al mediodía del domingo. Según ha podido saber este diario, los primeros en tener constancia de que algo raro ocurría en esa fiesta fueron los agentes de la Policía Local de Murcia, que se personaron en el chalé sobre las dos de la tarde. Los asistentes les explicaron que estaban celebrando un cumpleaños y que, sin saber los motivos, dos de sus compañeros se habían desplomado. Los jóvenes no hablaron de drogas. Los agentes avisaron inmediatamente al Centro de Coordinación de Emergencias de la Región, que mandó inicialmente una ambulancia de emergencias del Servicio Murciano de Salud (SMS) hasta esta pequeño chalé rodeado de limoneros. Al equipo médico le bastaron unos segundos para percatarse de que las drogas podían tener algo que ver en el estado de los jóvenes y pidieron el refuerzo de otras dos ambulancias.
El joven F.L.S., de 25 años y nacionalidad española, fue trasladado al hospital Morales Meseguer de Murcia en estado de coma, al igual que una mujer de 30 años, cuya identidad no ha trascendido, que también ingresó en coma, en la UCI del hospital Virgen de la Arrixaca. Otro de los asistentes a la fiesta, de entre 20 y 30 años, ingresó asimismo en Urgencias de La Arrixaca, pero su estado era menos grave que el de sus compañeros.
Según confirmaron ayer desde el Centro de Coordinación de Emergencias, los jóvenes habían sufrido una grave intoxicación tras haber ingerido 'éxtasis líquido' mezclado con bebidas alcohólicas. Tras ingresar en los centros y recibir tratamiento médico lograron salir del estado de coma. El parte de la Consejería de Sanidad afirmaba que los dos jóvenes evolucionaban favorablemente. Se esperaba su traslado a planta a lo largo de la jornada.
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