Enlazará las pedanías de la Cordillera Sur con Cabezo de Torres, El Esparragal y Churra y pasará a partir del día 3 por la Gran Vía
26.11.10 - 02:17 -
La nueva 'superlínea' de autobús que recorrerá de norte a sur el municipio transportará más de un millón y medio de viajeros en un año y será la tercera más utilizada por los murcianos, por debajo de la 44 (Alcantarilla-Murcia-UCAM), que supera los dos millones de usuarios, y de la 39, que conecta Murcia y el Campus de Espinardo, que ronda los dos millones.
La fusión de las líneas 5 (Algezares-Murcia) y 10 (Murcia-Cabezo de Torres) dará como resultado la nueva línea 50, que se estrenará el próximo viernes 3 de diciembre, coincidiendo con la entrada en vigor de los nuevos bonos y tarifas.
Los nueves autobuses y 18 conductores de este nuevo servicio recorrerán 12,62 kilómetros en cada trayecto y beneficiará a los vecinos de Algezares, Los Garres, San José de la Vega, Barrio del Progreso, Santiago El Mayor, Murcia, Zarandona, Churra, Cabezo de Torres y Montepinar (El Esparragal). En los días laborables tendrá hasta 122 frecuencias, 92 los sábados y 60 los domingos y días festivos. Esta línea atravesará el Barrio del Carmen, la Gran Vía Salzillo y pasará por el hospital Morales Meseguer. A la inversa, se adentrará en el barrio de Vistalegre por la carretera de Churra.
Una media de 6.700 viajeros al día -los sábados, 2.600; y los domingos y festivos, 1.300- subirán a la línea 50, según los cálculos de la concesionaria del transporte público en Murcia, Latbus. Esta fusión, según José Guillén, gerente de la EPT, tendrá un beneficio social incalculable. «Ese es el objetivo: mejorar el servicio que reciben los ciudadanos. Y estamos convencidos de que la aceptación va a ser muy buena», defiende Guillén. La creación de nuevas 'superlíneas' es un paso fundamental, según Guillén, para la mejora del sistema público de transporte, «pues la ciudad está creciendo, hay carreteras nuevas que se incorporan y tenemos que adaptarnos a los nuevos tiempos».
El ránking de líneas con mayor número de viajeros está encabezado por la 44 (10.400 viajeros diarios), la 39 (9.100 viajeros), la 26 (El Palmar-Arrixaca-Murcia), con 5.000 viajeros, y la 1, que conecta el Polígono Oeste-San Gines-Murcia-Nueva Condomina, con 3.200.
Según Latbus, la línea 50 es una demanda de los usuarios y los itinerarios variarán en cada trayecto para facilitar las conexiones de norte a sur, pues evitará hacer transbordos, por ejemplo, para los viajeros que se dirijan de las pedanías de la Cordillera Sur a Juan de Borbón.
Otras líneas ligadas al Plan de Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de Murcia están pendientes de autorización, como es el caso de la línea 28 Sangonera la Verde-Murcia, que incluiría servicios directos desde las 7.45 horas a Murcia, pasando por el Polígono Oeste pero evitando cruzar El Palmar y Aljucer.
La EPT defiende la línea 48
El caso de la línea 48 es harina de otro costal. La Entidad Pública del Transporte, Latbus y el Ayuntamiento de Molina defienden la viabilidad de este servicio entre Molina de Segura y La Arrixaca, pasando por la Gran Vía de Murcia, aunque el Consistorio murciano no es partidario. El concejal de Transportes de Murcia, Antonio Castillo, indicó ayer a 'La Verdad' que esta línea no obedece al modelo de transporte que está impulsando el Gobierno municipal, pues está previsto la construcción de dos intercambiadores de transportes en la plaza Circular y en el entorno del jardín de Floridablanca para evitar que circulen más autobuses por la Gran Vía. En su lugar se pondrá en marcha el bus exprés, que recorrerá cada cuatro minutos la principal arteria de la ciudad. «Esta línea que se sale de nuestro municipio no está dentro de nuestros planes», recalca.
El gerente de la EPT tiene previsto reunirse la próxima semana con el concejal de Transportes de Molina, Daniel Soltero, para encontrar una solución. «Estamos a favor de la línea 48 de Molina a El Palmar y estamos a la espera de que los ayuntamientos se pongan de acuerdo», dijo Guillén. Según los estudios del ente, la fusión de las actuales líneas 26 (El Palmar-Murcia), 22 (Molina-Murcia) y 21 (Ceutí-Murcia) supondría un incremento del 75% de la actual demanda en las poblaciones beneficiadas, ya que habría más autobuses, mejores horarios y un menor coste para la Administración al tener que destinar más dinero para cubrir el déficit. Esta 'superlínea' no autorizada tendría 2 millones de viajeros al año.
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