Un grupo cree que se trata de un hecho aislado, mientras que otros vecinos quieren llegar hasta el final
06.03.10 - 00:20 -
MARÍA D. CLEMENTE MURCIA. / la Verdad
«Un gran susto con final feliz y que va a generar controversia». Así describen los padres de los niños del colegio Monteazahar de Beniaján el intento de secuestro de uno de los niños a las puertas del centro.
El suceso ocurrió el pasado miércoles, antes de las cuatro de la tarde, hora a la que empezaban las clases extraescolares. El alumno, de diez años, acudió al centro educativo media hora antes, quería jugar con sus compañeros que se habían quedado a comer allí. Pero las puertas del colegio no estaban abiertas, no era la hora de entrada, por lo que el niño decidió esperarse junto a la verja. Fue entonces cuando un hombre de 30 años, que ya estaba merodeando por los alrededores del colegio, se le acercó y le dijo que allí no podía estar, que tenía que irse a su casa. Éste, el supuesto secuestrador, se ofreció a acompañarlo, le dijo que no temiera, que era un agente social, pero el niño no le creyó. Negándose a subir en el coche del hombre, el niño se agarró a la verja y empezó a llorar. Fue entonces cuando dos cuidadoras del comedor notaron que algo raro estaba ocurriendo, por lo que se acercaron hasta la valla y preguntaron qué era lo que ocurría. El hombre, nervioso, les dijo que era agente social y que iba a llevar al niño a su casa. Pero ellas tampoco le creyeron y le pidieron la identificación. Éste se negó en rotundo. Fue entonces cuando la madre de uno de los niños del centro se acercó para ver lo que estaba pasando y ante lo sucedido se ofreció para llevar el niño a casa.
Cuando los padres del niño se enteraron de lo ocurrido, se dieron cuenta de que su hijo había sido víctiva de un intento de secuestro, por lo que llamaron a los servicios de seguridad. Horas más tarde, el joven, cuyas iniciales son Y.B.A., fue detenido en la zona de Los Ramos por la Policía Local.
Aunque la mayoría de padres de los alumnos del centro escolar han manifestado que el acontecimiento es un caso aislado y que la zona de Monteazahar es la más segura de todo el pueblo de Beniaján, otros creen que hay que aumentar la presencia policial. «Hasta en los lugares más seguros los niños siguen estando desprotegidos» asegura Salvadora Lacárcel, la abuela de un niño del centro.
Así pues, hay diferentes posturas ante lo sucedido. Por un lado, un grupo de padres, que ha decidido no identificarse, cree que lo mejor es olvidar lo ocurrido, ya que aseguran que ha sido obra de una persona enferma y que no es necesario que los niños de diez años, que viven a dos calles , tengan que ser acompañados al colegio por sus padres.
Mientras tanto, otro grupo se muestra consternado y afirma que no van a parar hasta que no sepan qué pretendía el detenido con el secuestro del niño. «El pueblo de Beniajan quiere que se haga público el nombre del detenido, queremos tener a nuestros hijos seguros», afirma José Alfocea. El grupo asegura, además, que en la zona hay muy poca presencia policial, que el barrio se está convirtiendo en una zona conflictiva. «Me da miedo salir al parque. Hay muy mala gente. Los niños allí no están seguros», afirma María del Carmen Morote.
Ante estas declaraciones, un agente de la Policía Local, que suele vigilar la zona del colegio en la entrada y salida de los niños, ha asegurado que «el barrio es muy tranquilo y que no hay ninguna delincuencia a excepción de botellones».
06.03.10 - 00:20 -
MARÍA D. CLEMENTE MURCIA. / la Verdad
«Un gran susto con final feliz y que va a generar controversia». Así describen los padres de los niños del colegio Monteazahar de Beniaján el intento de secuestro de uno de los niños a las puertas del centro.
El suceso ocurrió el pasado miércoles, antes de las cuatro de la tarde, hora a la que empezaban las clases extraescolares. El alumno, de diez años, acudió al centro educativo media hora antes, quería jugar con sus compañeros que se habían quedado a comer allí. Pero las puertas del colegio no estaban abiertas, no era la hora de entrada, por lo que el niño decidió esperarse junto a la verja. Fue entonces cuando un hombre de 30 años, que ya estaba merodeando por los alrededores del colegio, se le acercó y le dijo que allí no podía estar, que tenía que irse a su casa. Éste, el supuesto secuestrador, se ofreció a acompañarlo, le dijo que no temiera, que era un agente social, pero el niño no le creyó. Negándose a subir en el coche del hombre, el niño se agarró a la verja y empezó a llorar. Fue entonces cuando dos cuidadoras del comedor notaron que algo raro estaba ocurriendo, por lo que se acercaron hasta la valla y preguntaron qué era lo que ocurría. El hombre, nervioso, les dijo que era agente social y que iba a llevar al niño a su casa. Pero ellas tampoco le creyeron y le pidieron la identificación. Éste se negó en rotundo. Fue entonces cuando la madre de uno de los niños del centro se acercó para ver lo que estaba pasando y ante lo sucedido se ofreció para llevar el niño a casa.
Cuando los padres del niño se enteraron de lo ocurrido, se dieron cuenta de que su hijo había sido víctiva de un intento de secuestro, por lo que llamaron a los servicios de seguridad. Horas más tarde, el joven, cuyas iniciales son Y.B.A., fue detenido en la zona de Los Ramos por la Policía Local.
Aunque la mayoría de padres de los alumnos del centro escolar han manifestado que el acontecimiento es un caso aislado y que la zona de Monteazahar es la más segura de todo el pueblo de Beniaján, otros creen que hay que aumentar la presencia policial. «Hasta en los lugares más seguros los niños siguen estando desprotegidos» asegura Salvadora Lacárcel, la abuela de un niño del centro.
Así pues, hay diferentes posturas ante lo sucedido. Por un lado, un grupo de padres, que ha decidido no identificarse, cree que lo mejor es olvidar lo ocurrido, ya que aseguran que ha sido obra de una persona enferma y que no es necesario que los niños de diez años, que viven a dos calles , tengan que ser acompañados al colegio por sus padres.
Mientras tanto, otro grupo se muestra consternado y afirma que no van a parar hasta que no sepan qué pretendía el detenido con el secuestro del niño. «El pueblo de Beniajan quiere que se haga público el nombre del detenido, queremos tener a nuestros hijos seguros», afirma José Alfocea. El grupo asegura, además, que en la zona hay muy poca presencia policial, que el barrio se está convirtiendo en una zona conflictiva. «Me da miedo salir al parque. Hay muy mala gente. Los niños allí no están seguros», afirma María del Carmen Morote.
Ante estas declaraciones, un agente de la Policía Local, que suele vigilar la zona del colegio en la entrada y salida de los niños, ha asegurado que «el barrio es muy tranquilo y que no hay ninguna delincuencia a excepción de botellones».
1 comentario:
En el blog Life in Beniajan también hemos recogido la noticia y en la encuesta que hemos puesto en marcha, la mayoría de los vecinos opina que hay inseguridad en el pueblo.
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