Abarán en 7 Días
Apenas unas pocas horas después de haber sido inaugurado oficialmente, la organización Ecologistas en Acción emitia un duro comunicado de prensa donde valora, muy negativamente, el nuevo sendero ecoturístico de Abarán en el tramo 'Soto Damián- Cañada Hidalgo.
La organización ecologista califica las nuevas infraestructuras como « innecesarias » , denuncia « que no se invierte en la recuperación de la huerta y el patrimonio histórico-cultural » , y recuerda que la zona « sigue sin estar protegida expresamente en el Plan General de Ordenación Municipal » .
Estas críticas se orientan, en primer lugar, al impacto medioambiental, ya que, según la asociación ecologista « supone sepultar con zahorra el camino y senda pública que constituía un suelo natural de tierra vegetal, perfectamente practicable. A esto, hay que sumar la instalación, en exceso, de centenares de metros de barandillas de madera en lugares fuera de peligro para el viandante, salvo las que están justificadas en algún tramo, como las ubicadas en el canal de la Central Hidroeléctrica de Nicolás ».
El comunicado de prensa expone que otra de las actuaciones a denunciar es « la colocación innecesaria de una sobreseñalización : 17 carteles indicativos en un tramo de ruta tan corto (1,5 km – 15 min.); a lo que hay que incluir el elevado número de bancos (8) y papeleras (6), que transforman el paraje de huerta tradicional en una especie de jardín urbano y que arremeten contra el entorno paisajístico de esta zona rural ».
Otro aspecto con el que no está de acuerdo la organización ecologista es en lo que califican como excesivo coste de la obra . « Los 73.258 € (más de 12 millones de pesetas) suponen un gran derroche de dinero público, teniendo en cuenta la situación económica actual, a lo que habría que añadir el mantenimiento posterior que requiere este exceso de infraestructuras ».
«También, habría que resaltar -sigue diciendo el comunicado- los grandes errores que contienen los carteles indicativos, teniendo en cuenta el elevado coste de esta obra. Como ejemplo, se confunden los restos de las norias existentes en la zona con ‘aceñas’; y existen errores tipográficos, como denominar al 'Cabezo de la Cobertera' como de ‘La Cobertura’».
Para Ecologistas en Acción, la presente obra resulta «ilógica e innecesaria para el disfrute de un sendero en el medio natural-rural, además de anti-ecológica y anti-turística, lo que contrasta con el nominativo de ‘ecoturístico’ del itinerario. Pero más aun, cuando el Ayuntamiento de Abarán (con sus concejalías de Medio Ambiente y Cultura), y la Comunidad Autónoma (con sus Direcciones Generales de Turismo y Cultura), no han sido capaces de invertir ni un euro en la recuperación de los sistemas tradicionales de construcción, cultivo y regadío, de los que resulta tan singular el paisaje del Valle de Ricote, del que tanto se cacarea desde las instituciones gubernamentales. Ni tampoco en la restauración del patrimonio histórico y arqueológico imperante en la zona».
La organización ecologista considera que, «con este tipo de obras se busca más bien “echarse la foto”, mientras el entorno que acaban de urbanizar se encuentra degradado por el abandono de la actividad agrícola y las diversas infraestructuras, que desde la propia Administración ha instalado en los últimos años en la zona, como la Depuradora de Aguas Residuales de Cañada de Hidalgo o el embalse aledaño. Y como colofón de tan desafortunadas actuaciones en el bello paraje de Corona, denunciar la importante desidia que sufre el yacimiento arqueológico del Cabezo de la Cobertera, el único granero fortificado conservado en al-Andalus, que, con menos dinero, se hubiera convertido en un auténtico reclamo cultural, educativo y turístico».
Por último, Ecologistas en Acción plantea a las distintas administraciones «que se dejen de fotos bonitas, pues lo realmente necesario es la revitalización de la huerta, como zona estratégica de producción de alimentos sanos y de calidad, fomentando lo ecológico, lo que sería muy beneficioso para todos, ya que mejoraría la calidad de vida de nuestro pueblo, ayudando a conservar nuestra historia y medio ambiente».
Apenas unas pocas horas después de haber sido inaugurado oficialmente, la organización Ecologistas en Acción emitia un duro comunicado de prensa donde valora, muy negativamente, el nuevo sendero ecoturístico de Abarán en el tramo 'Soto Damián- Cañada Hidalgo.
La organización ecologista califica las nuevas infraestructuras como « innecesarias » , denuncia « que no se invierte en la recuperación de la huerta y el patrimonio histórico-cultural » , y recuerda que la zona « sigue sin estar protegida expresamente en el Plan General de Ordenación Municipal » .
Estas críticas se orientan, en primer lugar, al impacto medioambiental, ya que, según la asociación ecologista « supone sepultar con zahorra el camino y senda pública que constituía un suelo natural de tierra vegetal, perfectamente practicable. A esto, hay que sumar la instalación, en exceso, de centenares de metros de barandillas de madera en lugares fuera de peligro para el viandante, salvo las que están justificadas en algún tramo, como las ubicadas en el canal de la Central Hidroeléctrica de Nicolás ».
El comunicado de prensa expone que otra de las actuaciones a denunciar es « la colocación innecesaria de una sobreseñalización : 17 carteles indicativos en un tramo de ruta tan corto (1,5 km – 15 min.); a lo que hay que incluir el elevado número de bancos (8) y papeleras (6), que transforman el paraje de huerta tradicional en una especie de jardín urbano y que arremeten contra el entorno paisajístico de esta zona rural ».
Otro aspecto con el que no está de acuerdo la organización ecologista es en lo que califican como excesivo coste de la obra . « Los 73.258 € (más de 12 millones de pesetas) suponen un gran derroche de dinero público, teniendo en cuenta la situación económica actual, a lo que habría que añadir el mantenimiento posterior que requiere este exceso de infraestructuras ».
«También, habría que resaltar -sigue diciendo el comunicado- los grandes errores que contienen los carteles indicativos, teniendo en cuenta el elevado coste de esta obra. Como ejemplo, se confunden los restos de las norias existentes en la zona con ‘aceñas’; y existen errores tipográficos, como denominar al 'Cabezo de la Cobertera' como de ‘La Cobertura’».
Para Ecologistas en Acción, la presente obra resulta «ilógica e innecesaria para el disfrute de un sendero en el medio natural-rural, además de anti-ecológica y anti-turística, lo que contrasta con el nominativo de ‘ecoturístico’ del itinerario. Pero más aun, cuando el Ayuntamiento de Abarán (con sus concejalías de Medio Ambiente y Cultura), y la Comunidad Autónoma (con sus Direcciones Generales de Turismo y Cultura), no han sido capaces de invertir ni un euro en la recuperación de los sistemas tradicionales de construcción, cultivo y regadío, de los que resulta tan singular el paisaje del Valle de Ricote, del que tanto se cacarea desde las instituciones gubernamentales. Ni tampoco en la restauración del patrimonio histórico y arqueológico imperante en la zona».
La organización ecologista considera que, «con este tipo de obras se busca más bien “echarse la foto”, mientras el entorno que acaban de urbanizar se encuentra degradado por el abandono de la actividad agrícola y las diversas infraestructuras, que desde la propia Administración ha instalado en los últimos años en la zona, como la Depuradora de Aguas Residuales de Cañada de Hidalgo o el embalse aledaño. Y como colofón de tan desafortunadas actuaciones en el bello paraje de Corona, denunciar la importante desidia que sufre el yacimiento arqueológico del Cabezo de la Cobertera, el único granero fortificado conservado en al-Andalus, que, con menos dinero, se hubiera convertido en un auténtico reclamo cultural, educativo y turístico».
Por último, Ecologistas en Acción plantea a las distintas administraciones «que se dejen de fotos bonitas, pues lo realmente necesario es la revitalización de la huerta, como zona estratégica de producción de alimentos sanos y de calidad, fomentando lo ecológico, lo que sería muy beneficioso para todos, ya que mejoraría la calidad de vida de nuestro pueblo, ayudando a conservar nuestra historia y medio ambiente».
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