MARÍA JESÚS GALINDO Cientos de personas llenaron ayer las calles de la ciudad para seguir el gran desfile del carnaval que, por primera vez en los 30 años de historia de estas fiestas, se celebró por la mañana y que además fue más largo que nunca porque participaron cerca de 60 grupos. La crisis ha hecho que este año la gente se anime más que nunca a vivir el carnaval. El frío no impidió que los miembros de las comparsas y los grupos coreográficos salieran a la calle, algunos de ellos bien ligeros de ropa, como las jóvenes de 'Ipanema' que engalanadas con plumas blancas y acompañadas por unos unicornios blancos con cola de sirena recrearon su espectacular 'Fantasía del Futuro'.
El eje peatonal era lo más parecido a un 'salsódromo' de Río de Janeiro, a juzgar por la cantidad de grupos de baile que llenaron de ambiente el centro. Entre ellos, las diosas hawaianas de la comparsa 'Universo' de Los Narejos (Los Alcázares), y las brasileñas de la comparsa de 'Las Marinas' de La Manga, en la que iba la Reina del Carnaval de los Mayores, Antonia Vigueras.
Entre los grupos más aplaudidos destacaron las comparsas de crítica social, como el grupo 'Real e Ilustre' de Vista Alegre que escenificó el encuentro que se disputó en Nueva Condomina entre murcianistas y cartageneristas y que acabó con un histórico 1-4 a favor de los blanquinegros.
Mucho más incisivos fueron los miembros de la comparsa 'Los Villanos' de Ciudad Jardín que representaron el 'caso Gürtel', en el que no faltaba el sastre con un carrito repleto de perchas con trajes de caballero con billetes de dinero pegados, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, muy bien caracterizada, así como el presidente valenciano Francisco Camps, los ladrones, los presos, la justicia representada por dos jueces y detrás dos chorizos.
La comparsa de Ciudad Jardín también hizo su particular crítica a la industria farmacéutica por la alarma generada con la Gripe A y el negocio de los laboratorios. Así, la mitad de sus componentes iban de enfermos, la otra mitad de personal sanitario y en medio de todos uno de ellos encamado y en cuarentena aislado por una funda de plástico. "Póntela que caduca", gritaban.
Otro de los disfraces que no pasó desapercibido fue el de la comparsa 'Ananda' de Cuesta Blanca que iban representando la película 'Novia a la fuga'. Junto a un buen nutrido grupo de chicas vestidas de novia destacaban los novios de esta comparsa: David Imani, de 6 años, y Araceli ros, de 18 meses.
El público seguía el desfile sin perderse un solo detalle y para completar la escena, en las calles del centro se podía ver puestos de castañas asada, carritos con pipas, palomitas de colores y globos.
Entre los grupos infantiles destacan 'Los Gnomos' del Estrecho de San Ginés, en cuya carroza iba la segunda dama infantil, Lara Piñero, y una chistera en cuyo interior iban sentados tres niños: Mario, José María y Alberto.
Una estela de color rosa inundaba la calle al paso de la comparsa infantil 'Imhlala-Panzi', en la que todos los niños iban disfrazados de petisuis, con un cartel que ponía 'Petit Panzi'. Sin ser ya pequeñas, pero llenas de colorido y gracia lucían sus trajes las 'Niñas Pijas' de la comparsa 'Icue' de Los Barreros.
Otra de las estrellas de la jornada fue 'Kelly', una perrita york shire que formaba parte de la comparsa 'Son de Son' de Los Barreros con el disfraz 'Floreciendo el carnaval'. Un circo con monstruo de tres cabezas incluido, la gua-gua, un grupo de charlestón, las hormiguitas de 'Ipanema Baby' continuaron con el desfile en el que participaron unos 60 grupos y que concluyó con la carroza de la Reina del Carnaval, Celia Campillo.
"Ha sido un éxito. Había cerca de 3.000 personas ambientando la calle, la gente bailando. No había un sitio en el que no hubiera gente. Es la primera vez que salimos por la mañana, pero a lo mejor habría que pensar en repetir", señaló la presidenta del Carnaval, Carmen Sánchez.
El eje peatonal era lo más parecido a un 'salsódromo' de Río de Janeiro, a juzgar por la cantidad de grupos de baile que llenaron de ambiente el centro. Entre ellos, las diosas hawaianas de la comparsa 'Universo' de Los Narejos (Los Alcázares), y las brasileñas de la comparsa de 'Las Marinas' de La Manga, en la que iba la Reina del Carnaval de los Mayores, Antonia Vigueras.
Entre los grupos más aplaudidos destacaron las comparsas de crítica social, como el grupo 'Real e Ilustre' de Vista Alegre que escenificó el encuentro que se disputó en Nueva Condomina entre murcianistas y cartageneristas y que acabó con un histórico 1-4 a favor de los blanquinegros.
Mucho más incisivos fueron los miembros de la comparsa 'Los Villanos' de Ciudad Jardín que representaron el 'caso Gürtel', en el que no faltaba el sastre con un carrito repleto de perchas con trajes de caballero con billetes de dinero pegados, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, muy bien caracterizada, así como el presidente valenciano Francisco Camps, los ladrones, los presos, la justicia representada por dos jueces y detrás dos chorizos.
La comparsa de Ciudad Jardín también hizo su particular crítica a la industria farmacéutica por la alarma generada con la Gripe A y el negocio de los laboratorios. Así, la mitad de sus componentes iban de enfermos, la otra mitad de personal sanitario y en medio de todos uno de ellos encamado y en cuarentena aislado por una funda de plástico. "Póntela que caduca", gritaban.
Otro de los disfraces que no pasó desapercibido fue el de la comparsa 'Ananda' de Cuesta Blanca que iban representando la película 'Novia a la fuga'. Junto a un buen nutrido grupo de chicas vestidas de novia destacaban los novios de esta comparsa: David Imani, de 6 años, y Araceli ros, de 18 meses.
El público seguía el desfile sin perderse un solo detalle y para completar la escena, en las calles del centro se podía ver puestos de castañas asada, carritos con pipas, palomitas de colores y globos.
Entre los grupos infantiles destacan 'Los Gnomos' del Estrecho de San Ginés, en cuya carroza iba la segunda dama infantil, Lara Piñero, y una chistera en cuyo interior iban sentados tres niños: Mario, José María y Alberto.
Una estela de color rosa inundaba la calle al paso de la comparsa infantil 'Imhlala-Panzi', en la que todos los niños iban disfrazados de petisuis, con un cartel que ponía 'Petit Panzi'. Sin ser ya pequeñas, pero llenas de colorido y gracia lucían sus trajes las 'Niñas Pijas' de la comparsa 'Icue' de Los Barreros.
Otra de las estrellas de la jornada fue 'Kelly', una perrita york shire que formaba parte de la comparsa 'Son de Son' de Los Barreros con el disfraz 'Floreciendo el carnaval'. Un circo con monstruo de tres cabezas incluido, la gua-gua, un grupo de charlestón, las hormiguitas de 'Ipanema Baby' continuaron con el desfile en el que participaron unos 60 grupos y que concluyó con la carroza de la Reina del Carnaval, Celia Campillo.
"Ha sido un éxito. Había cerca de 3.000 personas ambientando la calle, la gente bailando. No había un sitio en el que no hubiera gente. Es la primera vez que salimos por la mañana, pero a lo mejor habría que pensar en repetir", señaló la presidenta del Carnaval, Carmen Sánchez.
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