El colectivo rechaza su nueva ubicación al considerar que carece de marquesina, iluminación y punto de agua
06.07.10 - 01:49 -
JORGE G. BADÍA / La Verdad
Durante los últimos tres años, cada vez que se cerraba al tráfico la calle Mayor por la Semana Santa o las Fiestas de Mayo, siempre se repetía la misma cuestión: ¿dónde metemos a los taxistas? Precisamente, cuando la solución era inminente gracias al estreno de la nueva parada de taxis, ahora el gremio rechaza este emplazamiento frente a la plaza Adolfo Suárez hasta que el Consistorio no instale una marquesina, iluminación y un punto de agua.
La cuestión, a priori, se plantea desde posturas antagónicas. El Ayuntamiento cree que ha cumplido tras invertir 25.364 euros en la señalización, balizamiento y adecuación de 18 plazas de aparcamiento sobre una parcela de 700 metros cuadrados situada en la Calle Churruca y a la espalda de la cafetería El Cepo, donde ha quedado habilitada la nueva parada de taxis pendiente del estreno.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Taxistas de Alcantarilla, Jesús Navarro, considera que «es un aparcamiento vulgar sin marquesina e iluminación, será un infierno en verano». Navarro recuerda al Ayuntamiento que «prometieron una parada completa», subrayando que los 21 taxistas «se plantan y no están dispuestos a marcharse de la parada de Estudio 3, no vamos a pagar los 20.000 euros de la marquesina, el sector del taxi vive horas bajas». El presidente ha adelantado que solicitará una reunión «para ver lo que hace el ayuntamiento, queremos algo razonable». Eso sí, el gremio está decidido a aportar su granito de arena para dotar a la nueva parada de iluminación para las largas noches de trabajo y un zona de sombra que les resguarde de las altas temperaturas y la lluvia, «buscando un patrocinador que pague los 1.500 euros del toldo, hemos hablado con Estrella Levante».
El gremio habla
Ya puestos piden que «se mejore el drenaje, porque después del asfaltado de la parada, el agua se acumulará en la Cafetería de El Cepo». Por otro lado critican que en la nueva parada «no se ven los taxis, por los maceteros y el enorme cartel que promociona el Aparcamiento de Entrevías».
El último de los puntos, bastante lógico, por la habitual presencia de gorrillas en la zona, se centra en la seguridad. «Deberían vallar la parada para proteger a los compañeros». Finalmente recriminan al ayuntamiento, «la retirada de una de las señales de la parada antigua, lo que nos obliga a pelarnos con los conductores que aparcan en nuestro sitio porque no ven la señal de taxis».
Así las cosas, el estreno de la nueva parada -previsto para este mes- queda pospuesto y el aparcamiento compuesto y sin taxis.
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