El grupo estaba muy estructurado y disponía de áreas para la dirección de la organización, la contabilidad, la adquisición de cocaína, la manipulación y corte de la misma
02.02.10 - 17:09 -
REDACCIÓN MURCIA / la Verdad
La Guardia Civil ha desarticulado una banda formada por 12 personas dedicada al tráfico y corte de cocaína en la Región de Murcia, tal y como adelantó La Verdad el pasado domingo.
El delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, el coronel jefe de la 5ª Zona de la Guardia Civil, Benjamín Martín Mora, y la responsable de la Oficina Periférica de Comunicación de dicho Cuerpo, la teniente Carmen Verde, han informado esta mañana sobre la operación "AGARDO", llevada a cabo por dicho Cuerpo en la Región de Murcia y en el transcurso de la cual se ha desarticulado una importante organización dedicada al tráfico de drogas.
Con esta operación se ha logrado desarticular la estructura de la red, dando como resultado la detención de 12 personas, la incautación de más 8 kilos y medio de cocaína, más de 60 kilos de sustancias de corte y precursores y, múltiples efectos relacionados con el tráfico de drogas.
Las investigaciones se iniciaron hace siete meses, en cuanto se tuvo conocimiento de la existencia de una red organizada que se dedicaba a la adquisición de importantes cantidades de sustancias identificadas como precursores y la introducción en el territorio nacional importantes cantidades de cocaína procedente de Colombia.
Por tal motivo, la Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia y control, con el objetivo de identificar a los responsables de la red y proceder a su detención.
Fruto de este dispositivo se pudo constatar que la red, compuesta por un grupo afincado en la Comarca de Cartagena, se estaba dedicando a introducir, preparar y distribuir cocaína en España.
La estructura de esta organización delictiva estaba compuesta en su mayor parte por personas de nacionalidad española. Este grupo estaba totalmente definido por personas que tenían cometidos muy específicos, como la dirección de la organización, la contabilidad, la adquisición de cocaína, la manipulación y corte de la misma en los laboratorios clandestinos establecidos en domicilios privados y granjas porcinas.
Ésta organización se caracterizaba por la gran infraestructura para la adquisición, transporte y ocultación de drogas ya que utilizaban varias granjas porcinas para el almacenaje de las sustancias aprehendidas ocultándolas entre el ganado dificultando de esta manera la labor de investigación de los agentes.
Parte del grupo se encargaba de adquirir cantidades desproporcionadas de sustancias usadas como material de corte de la cocaína, evidenciando la importancia de la manipulación y su desvío al mercado ilícito, siendo un fiel indicador de la cantidad de droga que podían fabricar.
En estos laboratorios, los denominados “cocineros” manipulaban las drogas originales y obtenían cantidades mayores que envasaban en paquetes de kilogramo utilizando para ello un entramado de prensas hidráulicas.
Cuando la droga estaba preparada para su venta, empaquetada en paquetes de kilogramo, era vendida a traficantes menores encargados de “gramear” la mercancía para la venta al menudeo.
Parte de esta droga era distribuida en un club de alterne de la zona que dos de sus miembros regentaban y donde ejecutaban también actividades relacionadas con la prostitución.
Además de estas actividades ilícitas, para el blanqueo del dinero procedente de la venta de la droga, uno de los cabecillas expedía contratos de trabajo ficticios a extranjeros por un alto precio, dándoles de alta en su empresa como trabajadores con el fin de que pudieran obtener el alta en la Seguridad Social.
Los pasados días se inició la fase de explotación de esta operación, con un amplio dispositivo policial, llevándose a cabo, previa autorización judicial, 12 entradas y registros en Cartagena y Fuente Álamo, 3 de ellos simultáneos donde, además de drogas y material relacionado con el tráfico de drogas, se logró hallar y desmantelar dos laboratorios clandestinos de tratamiento y manipulación de cocaína deteniendo a doce personas integrantes de la red, desarticulando completamente la organización delictiva.
En la operación se han intervenido más de 8,5 kilos de cocaína, más de 60 kilogramos de precursores y sustancias de corte en los que incluye una sustancia conocida como “manitol”, que es un medicamento empleado para el engorde y el tratamiento del estrés del ganado, pero que, mezclado con el éter y consumido por ser humano, puede ser muy perjudicial para la salud provocando incluso edema cerebral.
La alta especialización del grupo desmantelado y las medidas de seguridad que adoptaban en sus desplazamientos, citas y, sobre todo, en la ocultación de la mercancía, complicó la labor de investigación del grupo ahora desarticulado.
02.02.10 - 17:09 -
REDACCIÓN MURCIA / la Verdad
La Guardia Civil ha desarticulado una banda formada por 12 personas dedicada al tráfico y corte de cocaína en la Región de Murcia, tal y como adelantó La Verdad el pasado domingo.
El delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, el coronel jefe de la 5ª Zona de la Guardia Civil, Benjamín Martín Mora, y la responsable de la Oficina Periférica de Comunicación de dicho Cuerpo, la teniente Carmen Verde, han informado esta mañana sobre la operación "AGARDO", llevada a cabo por dicho Cuerpo en la Región de Murcia y en el transcurso de la cual se ha desarticulado una importante organización dedicada al tráfico de drogas.
Con esta operación se ha logrado desarticular la estructura de la red, dando como resultado la detención de 12 personas, la incautación de más 8 kilos y medio de cocaína, más de 60 kilos de sustancias de corte y precursores y, múltiples efectos relacionados con el tráfico de drogas.
Las investigaciones se iniciaron hace siete meses, en cuanto se tuvo conocimiento de la existencia de una red organizada que se dedicaba a la adquisición de importantes cantidades de sustancias identificadas como precursores y la introducción en el territorio nacional importantes cantidades de cocaína procedente de Colombia.
Por tal motivo, la Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia y control, con el objetivo de identificar a los responsables de la red y proceder a su detención.
Fruto de este dispositivo se pudo constatar que la red, compuesta por un grupo afincado en la Comarca de Cartagena, se estaba dedicando a introducir, preparar y distribuir cocaína en España.
La estructura de esta organización delictiva estaba compuesta en su mayor parte por personas de nacionalidad española. Este grupo estaba totalmente definido por personas que tenían cometidos muy específicos, como la dirección de la organización, la contabilidad, la adquisición de cocaína, la manipulación y corte de la misma en los laboratorios clandestinos establecidos en domicilios privados y granjas porcinas.
Ésta organización se caracterizaba por la gran infraestructura para la adquisición, transporte y ocultación de drogas ya que utilizaban varias granjas porcinas para el almacenaje de las sustancias aprehendidas ocultándolas entre el ganado dificultando de esta manera la labor de investigación de los agentes.
Parte del grupo se encargaba de adquirir cantidades desproporcionadas de sustancias usadas como material de corte de la cocaína, evidenciando la importancia de la manipulación y su desvío al mercado ilícito, siendo un fiel indicador de la cantidad de droga que podían fabricar.
En estos laboratorios, los denominados “cocineros” manipulaban las drogas originales y obtenían cantidades mayores que envasaban en paquetes de kilogramo utilizando para ello un entramado de prensas hidráulicas.
Cuando la droga estaba preparada para su venta, empaquetada en paquetes de kilogramo, era vendida a traficantes menores encargados de “gramear” la mercancía para la venta al menudeo.
Parte de esta droga era distribuida en un club de alterne de la zona que dos de sus miembros regentaban y donde ejecutaban también actividades relacionadas con la prostitución.
Además de estas actividades ilícitas, para el blanqueo del dinero procedente de la venta de la droga, uno de los cabecillas expedía contratos de trabajo ficticios a extranjeros por un alto precio, dándoles de alta en su empresa como trabajadores con el fin de que pudieran obtener el alta en la Seguridad Social.
Los pasados días se inició la fase de explotación de esta operación, con un amplio dispositivo policial, llevándose a cabo, previa autorización judicial, 12 entradas y registros en Cartagena y Fuente Álamo, 3 de ellos simultáneos donde, además de drogas y material relacionado con el tráfico de drogas, se logró hallar y desmantelar dos laboratorios clandestinos de tratamiento y manipulación de cocaína deteniendo a doce personas integrantes de la red, desarticulando completamente la organización delictiva.
En la operación se han intervenido más de 8,5 kilos de cocaína, más de 60 kilogramos de precursores y sustancias de corte en los que incluye una sustancia conocida como “manitol”, que es un medicamento empleado para el engorde y el tratamiento del estrés del ganado, pero que, mezclado con el éter y consumido por ser humano, puede ser muy perjudicial para la salud provocando incluso edema cerebral.
La alta especialización del grupo desmantelado y las medidas de seguridad que adoptaban en sus desplazamientos, citas y, sobre todo, en la ocultación de la mercancía, complicó la labor de investigación del grupo ahora desarticulado.
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