Los ladrones practicaron dos butrones para acceder al interior de la instalación, de la que sustrajeron 600 euros
24.02.10 - 00:55 -
JORGE G. BADÍA / La Verdad
Con premeditación, alevosía y -como poco- con unas buenas tijeras para cortar todo el cableado de la alarma, la sirena y la telefonía que conecta directamente a la ITV de Alcantarilla con la central de seguridad. Ese al menos es el equipo mínimo que usaron los cacos este fin de semana para volver a asaltar la estación de Inspección Técnica de Vehículos por segunda vez en un mes.
El golpe pasó desapercibido hasta que a las 7.20 de la mañana del lunes los trabajadores se encontraron con el pastel: la ITV desvalijada y sin poder prestar servicio. Al parecer, los ladrones dejaron inutilizado el sistema Questor, una intranet de la Comunidad Autónoma que registra en tiempo real el dinero que entra en caja. Al no poder facturar las tasas, sólo hubo inspección técnica para los vehículos que acudían por segunda vez a la ITV.
Debido a los daños ocasionados por el robo, el servicio no se ha podido restablecer al 100% hasta el martes. Agentes de la Policía Nacional permanecieron durante toda la mañana del lunes tomando huellas en la ventanilla de administración, en los archivos y en la zona de personal. Por suerte, los asaltantes sólo se llevaron la pedrea, unos 600 euros, es decir el cambio previsto para los dos cajeros del primer turno del lunes.
Despreciaron los señuelos
La mayor parte de la plantilla de la ITV de Alcantarilla coincide en subrayar que podría «tratarse de la misma gente que robó a principios de diciembre». En aquella ocasión fueron menos delicados y dejaron la instalación sembrada de butrones, primero para cortar las alarmas y después para buscar por los despachos las dos cajas donde había algo más que cambio, «entre 5.000 y 6.000 euros». Pero en el último robo, «sabían lo que se hacían», apuntan.
Tras el primer hurto -sufrido en diciembre- se optó por instalar cajas señuelo por la ITV para despistar al personal. De hecho el pasado fin de semana abrieron varias donde no encontraron ni un solo euro, hasta dar con los 600 euros previstos como cambio para el cobro de las tasas del lunes. Tanto la ventana de administración como el cableado de seguridad, intranet y telefonía, ya han sido restablecidos por el personal de mantenimiento y la Comunidad Autónoma.
24.02.10 - 00:55 -
JORGE G. BADÍA / La Verdad
Con premeditación, alevosía y -como poco- con unas buenas tijeras para cortar todo el cableado de la alarma, la sirena y la telefonía que conecta directamente a la ITV de Alcantarilla con la central de seguridad. Ese al menos es el equipo mínimo que usaron los cacos este fin de semana para volver a asaltar la estación de Inspección Técnica de Vehículos por segunda vez en un mes.
El golpe pasó desapercibido hasta que a las 7.20 de la mañana del lunes los trabajadores se encontraron con el pastel: la ITV desvalijada y sin poder prestar servicio. Al parecer, los ladrones dejaron inutilizado el sistema Questor, una intranet de la Comunidad Autónoma que registra en tiempo real el dinero que entra en caja. Al no poder facturar las tasas, sólo hubo inspección técnica para los vehículos que acudían por segunda vez a la ITV.
Debido a los daños ocasionados por el robo, el servicio no se ha podido restablecer al 100% hasta el martes. Agentes de la Policía Nacional permanecieron durante toda la mañana del lunes tomando huellas en la ventanilla de administración, en los archivos y en la zona de personal. Por suerte, los asaltantes sólo se llevaron la pedrea, unos 600 euros, es decir el cambio previsto para los dos cajeros del primer turno del lunes.
Despreciaron los señuelos
La mayor parte de la plantilla de la ITV de Alcantarilla coincide en subrayar que podría «tratarse de la misma gente que robó a principios de diciembre». En aquella ocasión fueron menos delicados y dejaron la instalación sembrada de butrones, primero para cortar las alarmas y después para buscar por los despachos las dos cajas donde había algo más que cambio, «entre 5.000 y 6.000 euros». Pero en el último robo, «sabían lo que se hacían», apuntan.
Tras el primer hurto -sufrido en diciembre- se optó por instalar cajas señuelo por la ITV para despistar al personal. De hecho el pasado fin de semana abrieron varias donde no encontraron ni un solo euro, hasta dar con los 600 euros previstos como cambio para el cobro de las tasas del lunes. Tanto la ventana de administración como el cableado de seguridad, intranet y telefonía, ya han sido restablecidos por el personal de mantenimiento y la Comunidad Autónoma.
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