Las réplicas del símbolo sagrado halladas en una necrópolis del Puerto de Santa María (Cádiz) demuestran que los peregrinos ya iban a Caravaca antes del siglo XV El signo está presente en muchas construcciones religiosas de América del Sur
ENRIQUE SOLER/ La OpiniónLos hallazgos encontrados en una excavación en tierras gaditanas confirman que la Vera Cruz ha sido conocida y venerada durante siglos y siglos en tierras lejanas a Caravaca de la Cruz. Así lo demuestra una necrópolis hallada en unos terrenos anexos a la vieja y casi abandonada ermita de Santa Clara, en el Puerto de Santa María (Cádiz), donde las obras para la construcción de 65 viviendas de protección oficial han sacado a la luz una necrópolis en la que se han hallado numerosas réplicas de la Cruz de Caravaca, lo que para los expertos demuestra que ya existía tránsito de peregrinos hasta lo que hoy es la Basílica Santuario de Caravaca, donde se custodia y venera la Sagrada Reliquia.
Esta necrópolis pertenece a un antiguo cementerio del siglo XV que estuvo en uso hasta los primeros años del siglo XIX, época en la que se abrió el cementerio que todavía se usa en la actualidad. En las excavaciones se han encontrado unas 300 tumbas, donde se han hallado las réplicas de la Cruz. Según Ester López Rosendo, licenciada en Prehistoria y Arqueología por la Universidad de Sevilla y responsable de las excavaciones, los trabajos que se prolongarán hasta finales de este mes se iniciaron en el año 2009 y actualmente se encuentran en la tercera fase. En la primera fase ya se encontraron varios ajuares funerarios, donde aparecen tanto el símbolo de doble brazo como rosarios con la Vera Cruz.
En estos momentos, López baraja varias hipótesis para la aparición del símbolo en tierras tan remotas. La primera es que frailes franciscanos y jesuitas, que previamente habían pasado por Caravaca, fallecían en su peregrinar hacia el nuevo continente y eran enterrados en el puerto de Santa María, que en aquella época era la puerta de salida hacia el comercio con América, como han demostrado los hallazgos de restos religiosos procedentes santuarios peruanos, medallas mejicanas y símbolos de Santiago de Compostela y del Monasterio de Montserrat.
De hecho, el signo de la Vera Cruz está presente en numerosas construcciones religiosas de Sudamérica, como es el caso de la Cruz quelevantaron los franciscanos en la céntrica calle de Mercaderes, en La Habana (Cuba).
Por otro lado, el enclave en el que se centran las excavaciones se encuentra en un camino de salida natural de la ciudad gaditana hacia el norte y que conectaba la ciudad con varias vías de comunicación, entre ellas una que iba directamente a Murcia, dice la experta.
Por último, López afirma que una vez finalizados los trabajos junto a la ermita de Santa Clara se creará una publicación científica con todos los resultados y se construirá un centro de arte sacro con réplicas de los restos arqueológicos hallados.
El signo, también en Sudamérica
Los expertos también creen que la presencia de la Vera Cruz en tierras tan alejadas de Murcia pudo deberse a la presencia de los limosneros que iban pidiendo pecunio para sufragar los gastos de la construcción del Santuario de Caravaca.
Indalecio Pozo, director del Centro de Estudios Internacionales de la Vera Cruz, explica que, ante la falta de recursos para la finalización de la fachada del Santuario, que llevaba un retraso de más de siete décadas, hacia 1680 el Ayuntamiento y la Cofradía solicitan al rey una licencia durante ocho años para pedir limosna por todas la diócesis de España. A cambio de esa limosna se entregaba una Cruz
Esa licencia fue renovada en varias ocasiones hasta la conclusión de las obras. «Existe documentación de varias diócesis por donde pasaron los limosneros y una de ellas es Cádiz», indica Pozo. También existe una tercera hipótesis, que se centra en la venta del símbolo cristiano por parte de mercaderes de plata. De hecho, recientemente ha llegado al Centro de Estudios Internacionales de la Vera Cruz un contrato entre un platero de Caravaca y otro de Murcia, donde uno de ellos adquiría 600 cruces de plata para su venta por toda España.
Con los hallazgos encontrados en varias tumbas del Puerto de Santa María procedentes de gentes de distintas clases sociales se puededemostrar que «el culto de la Cruz estaba extendido, y no sólo entre los religiosos», aclara Pozo, que explica que también se han hallado símbolos de Caravaca en varios enterramientos de Jerez y Navarra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario