José María A. llevaba tres días acosando a su pareja, de la que se estaba separando y que se había refugiado en la vivienda
La Verdad
CARLOS GARRIDO José María A. se clavó un cuchillo en la boca del estómago frente a la puerta de la casa de su hija ayer a mediodía en el barrio de San Basilio. Allí se refugiaba su mujer. Mujer de la que se estaba separando y a la que acosaba desde hace tres días. "Esto es lo que queríais. Lo estábais buscando ¿no?", gritó este hombre de 50 años tras autoagredirse y después de caer al suelo como consecuencia de la herida que se provocó, según el relato de los vecinos. En el interior de la vivienda estaban su mujer, su hija y sus dos nietas, que no se atrevieron a abrir la puerta hasta que llegó la Policía. "No paraba de gritar. Estaba loco, fuera de sí. Y no era el primer día que venía. Ayer por la mañana (domingo para el lector) estaba sentado ahí enfrente muy nervioso. Yo me asomé por lo gritos. Estaba montando un espectáculo. No sé qué le pasaba. Se puso a gritar y acabó llamando a la Policía hasta que terminó por marcharse. Y hace dos noches (madrugada del sábado para el lector) montó un escándalo terrible. Apareció a las dos de la mañana pegando berridos y diciendo que le abrieran. Despertó a todo el mundo", explicó otra vecina que aseguró "que la pareja había iniciado un proceso de separación". El incidente de ayer a mediodía fue el final a tres días de acoso. José María y su mujer se habían separado. El sábado, durante una celebración familiar, se produjo una discusión por este motivo, según narraron unos familiares. Su mujer decidió refugiarse en la casa de una de las tres hijas del matrimonio. Matrimonio que había vivido muchos años en el tercer piso de ese mismo edificio. "José María fue el jefe de la escalera mucho tiempo" contaban sus antiguos vecinos. Tras la discusión del pasado sábado, el enfado y el acoso de José María a su esposa fue creciendo hasta que ayer terminó autoagrediéndose.El incidente provocó que mucha gente se acercara a curiosear al portal del edificio. "Lo sacaron con el cuchillo dentro de la barriga y pidiéndole que hablara. Pero no lo hizo", dijo una vecina. Otra mujer contó muy asustada que un vecino le advirtió para que no subiera: "Me dijo que José María estaba tumbado en el pasillo del primero con un cuchillo clavado en el estómago. Que había discutido con su familia. Que quería entrar en la casa de su hija y que no le dejaron porque estaba fuera de sí. Me quedé en el portal y enseguida empezaron a llegar muchos policías y los médicos. Cuando lo sacaron tenía la barriga inflada. Tenía el cuchillo hundido hasta el final". José María fue trasladado en ambulancia al hospital Morales Meseguer, donde ingresó con herida grave. Desde el centro hospitalario no detallaron cuál era su estado de salud.
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