LORCA/ Clausuran la puerta de Lourdes y acordonan San Francisco por el peligro de nuevos derrumbes

La Verdad
Se han colocado vallas de obra de dos metros para contener posibles desprendimientos
El resto de la cornisa del colegio se afianzara
La puerta de entrada a la gruta de Lourdes, en el Carrerón de San Francisco, permaneció ayer cerrada a cal y canto después del derrumbe de cuatro metros de cornisa que se produjo en la madrugada del pasado domingo. También ha quedado sin uso el quiosco de la Once que sufrió importantes daños con el desprendimiento de la techumbre del Colegio de San Francisco.
La zona ha sido acordonada para evitar accidentes en caso de que se produzcan nuevos desprendimientos. Tal y como anunció el concejal de Urbanismo, Francisco García, las primeras vallas, de color amarillo, han sido sustituidas por otras de dos metros de obra para «retener posibles desprendimientos si se produjeran».
Ahora los técnicos trabajan en determinar las causas que provocaron el desprendimiento de la cornisa. «Habrá que esperar el informe de los técnicos», dijo García, quien señaló que «afortunadamente no ha habido que lamentar daños personales».
Presencia de curiosos
El lugar fue visitado ayer por decenas de curiosos que a su paso por la calle Nogalte se paraban para ver los desprendimientos en la fachada del Colegio de San Francisco. Toda la acera en esa zona ha sido cerrada al tránsito de peatones desconociéndose por el momento cuándo podrá abrirse al público la gruta de Lourdes muy visitada por los lorquinos. Los bomberos han saneado la zona en previsión de que nuevos fragmentos pudieran caer a la vía pública.