El difunto tenía 18 o 19 años, según los primeros datos de la investigación, y era de Murcia capital
ALICIA MARTÍNEZ / NICOLÁS MORENO/ LOa Opinión
Un joven de 18 o 19 años apareció ayer muerto tras electrocutarse con los cables de un transformador eléctrico situado a unos cincuenta metros del recinto de fiestas de Jumilla.
Alrededor de las nueve de la mañana de ayer, el Servicio de Coordinación de Emergencias recibió una llamada alertando de que había un chico tirado sobre el tejado de la caseta del transformador eléctrico. Los primeros en llegar al lugar de los hechos fueron los bomberos del consorcio de extinción de incendios de la Región que, inmediatamente, se percataron de que el joven había perdido la vida. Acto seguido, se personó en el lugar del suceso un equipo de sanitarios que sólo pudo certificar la muerte del muchacho.
La Guardia Civil comenzó inmediatamente una investigación para esclarecer las causas del suceso. Del mismo modo, tuvo muy difícil identificar al fallecido, ya que no portaba ningún tipo de documentación y lo único que se encontró en su bolsillo fue un teléfono móvil, que resultó también dañado por la descarga. Fuentes municipales aclararon ayer que el único dato que podía trascender por el momento era que el joven residía en Murcia capital y no en Jumilla, por lo que se habría trasladado, posiblemente con motivo de la fiestas patronales de la localidad.
Aunque el aviso a los servicios de emergencia fue dado sobre las nueve de la mañana, todo apunta a que el joven recibió la descarga eléctrica sobre las cuatro de la madrugada, ya que el transformador eléctrico registró una irregularidad sobre esa hora.
El citado transformador se encuentra situado a aproximadamente unos cincuenta metros de una de las puertas de acceso al recinto ferial de la localidad. Precisamente, fueron los dueños del terreno donde se ubica los que hicieron la llamada al servicio de coordinación de emergencias, según explicaron ayer testigos presenciales. Ahora continúa la investigación para intentar esclarecer cómo se produjo este fatal suceso.
Trágicamente, el municipio de Jumilla pasó ayer de estar de fiesta a estar de luto, ya que el sábado vivió el día grande de sus fiestas patronales con la Gran Cabalgata del vino.
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