La Verdad
La exposición razonada insiste en que el pabellón deportivo de Ceutí fue inaugurado en el 2003, cuando el expediente municipal de contratación es de 2004
La exposición razonada insiste en que el pabellón deportivo de Ceutí fue inaugurado en el 2003, cuando el expediente municipal de contratación es de 2004
Manuel Hurtado, quien fue alcalde socialista de Ceutí durante casi 30 años y que en la actualidad disfruta de un acta de senador, está muy cerca de ver cumplido uno de sus más repetidos deseos de los últimos meses: dar explicaciones a la Justicia sobre el extraño caso del pabellón deportivo que fue inaugurado antes de ser formalmente contratadas las obras. Un caso inédito en la administración pública, que le mantiene desde hace unos años bajo sospecha de haber incurrido en presuntos delitos de prevaricación y falsedad en documento público.
Recientemente, como publicó 'La Verdad' en exclusiva, el fiscal anticorrupción de Murcia, Juan Pablo Lozano, había pedido del Juzgado de Instrucción número 5 de Molina de Segura que elevara las diligencias al Tribunal Supremo, por considerar que la investigación estaba concluida y por ser ése el único órgano judicial con potestad para actuar contra Hurtado, quien, por ser senador, está protegido por un fuero especial.
La juez Joaquina Parra Salmerón ha coincidido con las apreciaciones del Ministerio Público y acaba de remitir una Exposición Razonada a la Sala de lo Penal del Alto Tribunal, en la que incluye todas aquellas razones por las que, en su opinión, se debe investigar si el entonces alcalde pudo incurrir en los citados delitos de falsedad y prevaricación.
«Me pareció extraño»
En su escrito, la instructora señala que en fecha no determinada, pero anterior a diciembre del 2003, Manuel Hurtado encargó verbalmente a una empresa la construcción del complejo deportivo José Antonio Camacho de Ceutí. En el expediente de contratación de esas obras no constaba, tal y como certificó en el 2008 el secretario municipal, ni la publicación en el BORM de la licitación de la obra, ni acto de apertura de plicas, ni ofertas presentadas, ni ficha patrimonial del polideportivo ingresando en el inventario del patrimonio municipal, ni acuerdo de la Junta de Gobierno Local aprobando el pliego de condiciones. Más aún, en el 2003 ni siquiera existía partida presupuestaria destinada a ese proyecto.
Pese a todo ello, el 10 de diciembre del 2003 se celebró la inauguración oficial de las instalaciones, que presidió el alcalde y a la que asistieron personalidades y medios de comunicación.
No es hasta 2004 cuando empieza a documentarse todo el expediente de contratación. La juez incluye en su Exposición Razonada algunas declaraciones que parecen inculpar al senador socialista, como la del ingeniero técnico municipal, quien admitió en el juzgado que «una vez terminada la obra se le pidió por Manuel Hurtado que verificase que las obras ejecutadas se correspondían con las facturas aportadas y después se documentó la obra», y añadió que una vez terminada la obra, Manuel Hurtado le pidió que documentara el proyecto; que le pareció extraño que se documentara una obra que ya estaba terminada, pero que lo hizo a petición de Hurtado. «Es la única vez -añadió- que he actuado de ese modo», confesó el técnico municipal.
Con esa forma de proceder, no fue hasta el 1 de abril del 2004, cuatro meses después de inaugurado el pabellón, cuando el alcalde de Ceutí y la constructora firmaron el contrato para realizar las obras. El acta de recepción del complejo deportivo se firma el 11 de octubre del 2004.
La juez sostiene que de la investigación se desprende que si se redactaron los documentos relativos a la construcción del complejo, todos ellos con fecha posterior a su construcción, fue porque el Ayuntamiento solicitó una subvención a la Federación de Fútbol y necesitaba presentar un expediente. Acaba la Exposición Razonada con una declaración del secretario municipal, quien admitió: «Creo que no hubo licitación pública de la obra».
Previsiblemente, Hurtado tendrá que dar pronto explicaciones de todo ello en el Supremo. Algo que afirma estar deseando hacer desde hace tiempo. Aunque, como ya le recordó el fiscal, si tantas ganas tenía, le bastaba con haber renunciado al privilegio del fuero.
La exposición razonada insiste en que el pabellón deportivo de Ceutí fue inaugurado en el 2003, cuando el expediente municipal de contratación es de 2004
La exposición razonada insiste en que el pabellón deportivo de Ceutí fue inaugurado en el 2003, cuando el expediente municipal de contratación es de 2004
Manuel Hurtado, quien fue alcalde socialista de Ceutí durante casi 30 años y que en la actualidad disfruta de un acta de senador, está muy cerca de ver cumplido uno de sus más repetidos deseos de los últimos meses: dar explicaciones a la Justicia sobre el extraño caso del pabellón deportivo que fue inaugurado antes de ser formalmente contratadas las obras. Un caso inédito en la administración pública, que le mantiene desde hace unos años bajo sospecha de haber incurrido en presuntos delitos de prevaricación y falsedad en documento público.
Recientemente, como publicó 'La Verdad' en exclusiva, el fiscal anticorrupción de Murcia, Juan Pablo Lozano, había pedido del Juzgado de Instrucción número 5 de Molina de Segura que elevara las diligencias al Tribunal Supremo, por considerar que la investigación estaba concluida y por ser ése el único órgano judicial con potestad para actuar contra Hurtado, quien, por ser senador, está protegido por un fuero especial.
La juez Joaquina Parra Salmerón ha coincidido con las apreciaciones del Ministerio Público y acaba de remitir una Exposición Razonada a la Sala de lo Penal del Alto Tribunal, en la que incluye todas aquellas razones por las que, en su opinión, se debe investigar si el entonces alcalde pudo incurrir en los citados delitos de falsedad y prevaricación.
«Me pareció extraño»
En su escrito, la instructora señala que en fecha no determinada, pero anterior a diciembre del 2003, Manuel Hurtado encargó verbalmente a una empresa la construcción del complejo deportivo José Antonio Camacho de Ceutí. En el expediente de contratación de esas obras no constaba, tal y como certificó en el 2008 el secretario municipal, ni la publicación en el BORM de la licitación de la obra, ni acto de apertura de plicas, ni ofertas presentadas, ni ficha patrimonial del polideportivo ingresando en el inventario del patrimonio municipal, ni acuerdo de la Junta de Gobierno Local aprobando el pliego de condiciones. Más aún, en el 2003 ni siquiera existía partida presupuestaria destinada a ese proyecto.
Pese a todo ello, el 10 de diciembre del 2003 se celebró la inauguración oficial de las instalaciones, que presidió el alcalde y a la que asistieron personalidades y medios de comunicación.
No es hasta 2004 cuando empieza a documentarse todo el expediente de contratación. La juez incluye en su Exposición Razonada algunas declaraciones que parecen inculpar al senador socialista, como la del ingeniero técnico municipal, quien admitió en el juzgado que «una vez terminada la obra se le pidió por Manuel Hurtado que verificase que las obras ejecutadas se correspondían con las facturas aportadas y después se documentó la obra», y añadió que una vez terminada la obra, Manuel Hurtado le pidió que documentara el proyecto; que le pareció extraño que se documentara una obra que ya estaba terminada, pero que lo hizo a petición de Hurtado. «Es la única vez -añadió- que he actuado de ese modo», confesó el técnico municipal.
Con esa forma de proceder, no fue hasta el 1 de abril del 2004, cuatro meses después de inaugurado el pabellón, cuando el alcalde de Ceutí y la constructora firmaron el contrato para realizar las obras. El acta de recepción del complejo deportivo se firma el 11 de octubre del 2004.
La juez sostiene que de la investigación se desprende que si se redactaron los documentos relativos a la construcción del complejo, todos ellos con fecha posterior a su construcción, fue porque el Ayuntamiento solicitó una subvención a la Federación de Fútbol y necesitaba presentar un expediente. Acaba la Exposición Razonada con una declaración del secretario municipal, quien admitió: «Creo que no hubo licitación pública de la obra».
Previsiblemente, Hurtado tendrá que dar pronto explicaciones de todo ello en el Supremo. Algo que afirma estar deseando hacer desde hace tiempo. Aunque, como ya le recordó el fiscal, si tantas ganas tenía, le bastaba con haber renunciado al privilegio del fuero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario