Mientras muchos de los que poseen un negocio en los alrededores recelan del proyecto, los habitantes de la zona ven con buenos ojos una posible 'peatonalización'27.10.09 -
P. NAVARRO MURCIA / La Verdad
¿Dónde hay tráfico rodado hay vida? La respuesta a esta cuestión es la que divide a los vecinos y comerciantes de los aledaños de la avenida de La Libertad, ante la posibilidad de que dicha vía se restrinja al tráfico, tal y como ha propuesto el Consistorio murciano, a instancias, según señala, de los habitantes y empresarios de la zona.
La postura 'oficial', mantenida por las asociaciones que fueron convocadas a la reunión celebrada el pasado jueves en el Ayuntamiento, es que esta decisión puede revitalizar, en cierto modo, la zona ante una batalla que parecía prácticamente pérdida: la librada con los grandes centros comerciales del extrarradio.
«La existencia de un área peatonal, o de tráfico restringido nos ofrece grandes posibilidades. Ahora podremos organizar regularmente actividades culturales y de ocio, tanto para niños como para mayores, que hagan el centro la ciudad más atractivo». Así avalaba la propuesta Carmen Piñero, Presidenta de la Asociación Triángulo, entidad que agrupa a casi a cien comercios del entorno, y desde la que se pretende impulsar algo más que un mero lavado de cara a la zona. «Intentaremos instalar una zona Wi-Fi gratuita, organizar cursos de tai chi o traer cuentacuentos, entre otras propuestas, para facilitar, en principio, que la ciudad sea un entorno más amable».
Los vecinos también parecen estar encantados con la posibilidad, siempre que se respete la entrada y salida de los garajes,y la circulación de los vehículos de emergencias. «En casi en todas las ciudades de alguna dimensión se ha apostado por peatonalizar el área comercial, ¿por qué no en Murcia?» Se pregunta Juan antonio López, presidente de la Asociación de Vecinos del Complejo Princesa. «Somos unas 200 familias y, en general, estamos de acuerdo con el proyecto, al igual que la gran mayoría de los que asistieron a la reunión con la concejala de Seguridad y Circulación, Nuria Fuentes».
Y ahí es donde falla precisamente la teoría de este aparente consenso. Y es que muchos de los comerciantes que operan en las cercanías a la susodicha vía afirman haberse enterado del proyecto a través de la prensa. «Yo no pertenezco a ninguna asociación y a mí nadie me ha preguntado por mi opinión», asegura Sonia Cano, la propietaria de una cafetería situada junto a esta vía. Más curioso es el caso Sonia Fernández, dueña de la tienda de ropa Charate y miembro de la Asociación Triángulo, que niega que se le haya comunicado personalmente ninguna de estas propuestas, por parte siquiera de esta entidad.
Ellas, como otros minoristas de los alrededores quieren que la avenida de la Libertad vuelva al mismo estado en que se encontraba cuando se iniciaron la obras de parking. «¡Dónde hay tráfico hay movimiento! Bastante hemos tenido ya que aguantar estos últimos dos años, perdiendo 9.000 vehículos diarios, para que ahora sigamos con el tráfico cerrado», apunta Rocky Belda, dueño de la peluquería del mismo nombre. «La gente que no es de Murcia sólo sabe una ruta para ir a Murcia, si los obligas a ir hasta la plaza Circular acabarán marchándose a los centros comerciales», indicaba otro empresario. "»n un comercio 24 horas como el mío es prioritario tener buenos accesos para que la gente pueda venir cómodamente si tiene una urgencia. Sin embargo, desde que empezó la construcción del parking, están muy complicados y si paras tan sólo unos minutos ya tienes a la policía encima multándote», afirma David Fernández, propietario de la farmacia Cónsul. Ellos no son los únicos que tienen la sensación de que una peatonalización de la zona agravará, aún más su precaria situación. Todos insisten en que su negocio se ha resentido desde que se iniciaron los trabajos en la arteria, a pesar de que no son capaces de deslindar qué porcentaje de pérdidas corresponde a este hecho y cuál es únicamente producto de la crisis económica, y a pesar que la apertura al tráfico de la vida nuevamente no promete facilidades para aparcar más allá de los subterráneos.
«Hemos hecho un esfuerzo soportando las obras del parking, esperando una situación mejor. ¿Por qué se cambia ahora el plan inicial?», señala Belda. Y ahí es donde nadie se atreve a pronunciarse a título personal, a pesar de que todos, de puertas adentro, coinciden en una misma teoría: «la decisión está auspiciada por El Corte Inglés, el verdadero gran beneficiado». La concejala de Seguridad y Circulación niega rotundamente que sea esta empresa la que ha planteado la iniciativa. No obstante, tampoco niega, por ejemplo , que estos grandes almacenes se hayan cubierto las espaldas gestionando una posible entrada directa desde el nuevo aparcamiento al interior del centro comercial. Esta opción parece no gustar al pequeño comercio, que considera que, de esta manera, todo aquel que acuda a El Corte Inglés para realizar sus compras evitará poner un pie en la calle. «Tampoco hay que olvidar que son precisamente estosgrandes almacenes los que siguen dando comercial a la zona», se señala por parte de los vecinos del Complejo Princesa.
Lo que está claro es que, pase lo que pase, la decisión final no será unánime. Los comerciantes de la plaza Condestable prometen guerray aseguran haber presentado ya un escrito en contra de una posible restricción del tráfico. El Ayuntamiento de Murcia se ha comprometido a atender al sentimiento mayoritario aunque considera que no hay motivos reales ni lógicos para discrepar de esta posibilidad. Habrá que esperar todavía unas cuantas entregas más para un desenlace.
La postura 'oficial', mantenida por las asociaciones que fueron convocadas a la reunión celebrada el pasado jueves en el Ayuntamiento, es que esta decisión puede revitalizar, en cierto modo, la zona ante una batalla que parecía prácticamente pérdida: la librada con los grandes centros comerciales del extrarradio.
«La existencia de un área peatonal, o de tráfico restringido nos ofrece grandes posibilidades. Ahora podremos organizar regularmente actividades culturales y de ocio, tanto para niños como para mayores, que hagan el centro la ciudad más atractivo». Así avalaba la propuesta Carmen Piñero, Presidenta de la Asociación Triángulo, entidad que agrupa a casi a cien comercios del entorno, y desde la que se pretende impulsar algo más que un mero lavado de cara a la zona. «Intentaremos instalar una zona Wi-Fi gratuita, organizar cursos de tai chi o traer cuentacuentos, entre otras propuestas, para facilitar, en principio, que la ciudad sea un entorno más amable».
Los vecinos también parecen estar encantados con la posibilidad, siempre que se respete la entrada y salida de los garajes,y la circulación de los vehículos de emergencias. «En casi en todas las ciudades de alguna dimensión se ha apostado por peatonalizar el área comercial, ¿por qué no en Murcia?» Se pregunta Juan antonio López, presidente de la Asociación de Vecinos del Complejo Princesa. «Somos unas 200 familias y, en general, estamos de acuerdo con el proyecto, al igual que la gran mayoría de los que asistieron a la reunión con la concejala de Seguridad y Circulación, Nuria Fuentes».
Y ahí es donde falla precisamente la teoría de este aparente consenso. Y es que muchos de los comerciantes que operan en las cercanías a la susodicha vía afirman haberse enterado del proyecto a través de la prensa. «Yo no pertenezco a ninguna asociación y a mí nadie me ha preguntado por mi opinión», asegura Sonia Cano, la propietaria de una cafetería situada junto a esta vía. Más curioso es el caso Sonia Fernández, dueña de la tienda de ropa Charate y miembro de la Asociación Triángulo, que niega que se le haya comunicado personalmente ninguna de estas propuestas, por parte siquiera de esta entidad.
Ellas, como otros minoristas de los alrededores quieren que la avenida de la Libertad vuelva al mismo estado en que se encontraba cuando se iniciaron la obras de parking. «¡Dónde hay tráfico hay movimiento! Bastante hemos tenido ya que aguantar estos últimos dos años, perdiendo 9.000 vehículos diarios, para que ahora sigamos con el tráfico cerrado», apunta Rocky Belda, dueño de la peluquería del mismo nombre. «La gente que no es de Murcia sólo sabe una ruta para ir a Murcia, si los obligas a ir hasta la plaza Circular acabarán marchándose a los centros comerciales», indicaba otro empresario. "»n un comercio 24 horas como el mío es prioritario tener buenos accesos para que la gente pueda venir cómodamente si tiene una urgencia. Sin embargo, desde que empezó la construcción del parking, están muy complicados y si paras tan sólo unos minutos ya tienes a la policía encima multándote», afirma David Fernández, propietario de la farmacia Cónsul. Ellos no son los únicos que tienen la sensación de que una peatonalización de la zona agravará, aún más su precaria situación. Todos insisten en que su negocio se ha resentido desde que se iniciaron los trabajos en la arteria, a pesar de que no son capaces de deslindar qué porcentaje de pérdidas corresponde a este hecho y cuál es únicamente producto de la crisis económica, y a pesar que la apertura al tráfico de la vida nuevamente no promete facilidades para aparcar más allá de los subterráneos.
«Hemos hecho un esfuerzo soportando las obras del parking, esperando una situación mejor. ¿Por qué se cambia ahora el plan inicial?», señala Belda. Y ahí es donde nadie se atreve a pronunciarse a título personal, a pesar de que todos, de puertas adentro, coinciden en una misma teoría: «la decisión está auspiciada por El Corte Inglés, el verdadero gran beneficiado». La concejala de Seguridad y Circulación niega rotundamente que sea esta empresa la que ha planteado la iniciativa. No obstante, tampoco niega, por ejemplo , que estos grandes almacenes se hayan cubierto las espaldas gestionando una posible entrada directa desde el nuevo aparcamiento al interior del centro comercial. Esta opción parece no gustar al pequeño comercio, que considera que, de esta manera, todo aquel que acuda a El Corte Inglés para realizar sus compras evitará poner un pie en la calle. «Tampoco hay que olvidar que son precisamente estosgrandes almacenes los que siguen dando comercial a la zona», se señala por parte de los vecinos del Complejo Princesa.
Lo que está claro es que, pase lo que pase, la decisión final no será unánime. Los comerciantes de la plaza Condestable prometen guerray aseguran haber presentado ya un escrito en contra de una posible restricción del tráfico. El Ayuntamiento de Murcia se ha comprometido a atender al sentimiento mayoritario aunque considera que no hay motivos reales ni lógicos para discrepar de esta posibilidad. Habrá que esperar todavía unas cuantas entregas más para un desenlace.
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