La Verdad/ Murcia
Un nuevo avistamiento de carabela portuguesa puso en pie de guerra este fin de semana a los vecinos de Águilas. Lo que inicialmente era un rumor extendido entre la población se confirmó finalmente desde el Instituto Español de Oceanografía (IEO). Desde este organismo confirmaron que la presencia de estos ejemplares era algo que ya tenían previsto «pero son casos muy puntuales que no deben suscitar motivo de alarma».
Las previsiones para las costas de Murcia este verano son la práctica ausencia de medusas en el interior del Mar Menor y una posible presencia, muy escasa, de Pelagia Noctiluca y el resto de las especies habituales del Mediterráneo. «La presencia de carabela portuguesa debe considerarse como un hecho puntual», indicaron desde el IEO.
Las carabelas encontradas hasta ahora no pasan de ser un hecho aislado «y, al no tratarse de una especie propia del Mediterráneo, es de esperar que en los próximos días estas medusas terminen muriendo y desaparezcan. Es posible también, no obstante, que se produzca la aparición de algunos de estos ejemplares en las playas arrastrados por el viento», informaron desde el IEO.
Este verano se continuará con el plan de detección de alerta de medusas en el que participa tanto el IEO como el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y que se apoya en los registros de presencia de medusas de los puestos de primeros auxilios de las playas y los avistamientos por clubes de buceo.
Un nuevo avistamiento de carabela portuguesa puso en pie de guerra este fin de semana a los vecinos de Águilas. Lo que inicialmente era un rumor extendido entre la población se confirmó finalmente desde el Instituto Español de Oceanografía (IEO). Desde este organismo confirmaron que la presencia de estos ejemplares era algo que ya tenían previsto «pero son casos muy puntuales que no deben suscitar motivo de alarma».
Las previsiones para las costas de Murcia este verano son la práctica ausencia de medusas en el interior del Mar Menor y una posible presencia, muy escasa, de Pelagia Noctiluca y el resto de las especies habituales del Mediterráneo. «La presencia de carabela portuguesa debe considerarse como un hecho puntual», indicaron desde el IEO.
Las carabelas encontradas hasta ahora no pasan de ser un hecho aislado «y, al no tratarse de una especie propia del Mediterráneo, es de esperar que en los próximos días estas medusas terminen muriendo y desaparezcan. Es posible también, no obstante, que se produzca la aparición de algunos de estos ejemplares en las playas arrastrados por el viento», informaron desde el IEO.
Este verano se continuará con el plan de detección de alerta de medusas en el que participa tanto el IEO como el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y que se apoya en los registros de presencia de medusas de los puestos de primeros auxilios de las playas y los avistamientos por clubes de buceo.
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