No habrá subasta del edificio que alberga el Museo de la Fiesta. La sociedad Caravaca Jubilar, que desde hace una década viene gestionando los museos de la localidad, pagará en breves fechas todas sus deudas. Juan Rigabert, gerente de esta sociedad, confirmaba ayer que «la apertura del mecanismo extraordinario de financiación de las comunidades autónomas -el FLA- al cual se ha acogido Caravaca Jubilar como organismo dependiente de la Comunidad Autónoma, va a posibilitar que la totalidad de la deuda de esta sociedad vaya a ser liquidada en las próximas semanas».
La sociedad Caravaca Jubilar tiene una deuda superior a los 630.000 euros con la Seguridad Social, organismo que presentó un embargo sobre los bienes de la sociedad. El edificio del Palacio de los Uribe ha servido de garantía para que se haya negociado, en más de una ocasión, un aplazamiento extraordinario para el pago de la deuda. Rigabert calificaba de «buena noticia» la inclusión de la deuda de la sociedad en el FLA. «Esto nos va a permitir, entre otras cosas, que la deuda contraída con la Seguridad Social, sobre la que había un aplazamiento para pagarla durante los próximos cinco años, va a quedar saldada con carácter anticipado en breves fechas lo que supondrá la anulación definitiva del expediente de apremio iniciado para garantizar el pago de dicha deuda», explicó.
La interrupción del proceso de aplazamiento ha originado un nuevo anuncio de subasta del inmueble que se fijó para el día 13 de noviembre, circunstancia que había levantado revuelo en la localidad. Rigabert aclaró que «al saldar la deuda por completo se anula de forma definitivamente la vía de apremio, por lo que el inmueble no saldrá a subasta; ahora no se trata de un aplazamiento, sino de la anulación del proceso».
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