La sospechosa mantenía relaciones sexuales con un chico de 14 años desde que su marido falleció en un accidente de motocicleta
07.04.10 - 00:44 -
RICARDO FERNÁNDEZ MURCIA.
La pérdida de su esposo en un accidente de motocicleta no le impidió seguir haciendo lo mismo que antes, como mantener relaciones sexuales y consumir hachís, marihuana y cocaína, aunque en su nueva vida los elegidos eran niños menores de edad. Una vecina de Murcia, cuya identidad responde a las iniciales M.G.B., ha sido ingresada en prisión como sospechosa de abusos sexuales y corrupción de menores, así como de un delito contra la salud pública, al existir datos que apuntan a que les facilitó y les indujo a consumir sustancias estupefacientes.
Fuentes próximas al caso han confirmado a 'La Verdad' que la investigación, que ha acabado con M.G.B. encarcelada, se inició el pasado marzo, después de que la madre de uno de los menores de edad se enterara de lo que estaba ocurriendo y presentara una denuncia ante el Cuerpo Nacional de Policía. Los agentes del Servicio de Atención a la Familia (SAF) no tardaron en localizar a un grupo de menores de edad, todos ellos varones de entre 12 y 15 años de edad, que se habrían visto inmersos en ese tipo de prácticas y, tras tomarles testimonio y confirmar que todos los datos apuntaban a que la denuncia tenía una base firme, procedieron a detener a la sospechosa.
Según las fuentes mencionadas, la mujer sólo reconoció haber mantenido una relación de amistad con estos menores, cuya presencia en su domicilio era muy habitual, y rechazó tajantemente haberles facilitado drogas o haberles animado a consumirlas, así como haber tenido relaciones sexuales con alguno de ellos. Pese a insistir en que era inocente de los hechos que se le imputaban, el juez de guardia consideró que los indicios en su contra eran numerosos y especialmente graves y ordenó su ingreso en prisión preventiva, situación en la que se encuentra a día de hoy.
Les pedía que llevaran 'coca'
Básicamente, los hechos que se le atribuyen a este vecina de Murcia son, según las fuentes mencionadas, haber tenido relaciones sexuales completas con un niño de 14 años, hijo de un matrimonio de su mismo edificio, así como de haber inducido a éste y a otros menores a consumir varios tipos de drogas, como hachís, marihuana y cocaína, tanto esnifada como fumada. Incluso se investiga si la mujer habría pedido a varios de estos menores que la acompañaran en sus desplazamientos a uno de sus habituales puntos de aprovisionamiento de drogas, el bloque 3 de la calle Santa Rita, en el barrio murciano de La Fama, así como de haber animado a otro de los menores a que llevara cocaína a casas. Este chico la conseguía supuestamente robándosela a su tío, consumidor de ese estupefaciente, o de un vecino, a quien habría extorsionado -lo amenazaba con contar a la Policía que era un traficante- para que le diera la droga.
Siempre según las mismas fuentes, los agentes del SAF habrían localizado incluso varias fotos que los menores habían colgado en la red social Tuenti y en las que puede vérseles consumiendo lo que, según ha reconocido ya alguno de ellos, era un porro de hachís. Hasta el momento, tanto la Policía como el juzgado que instruye las diligencias han localizado e interrogado a cinco menores que habrían sido víctimas de estas prácticas, aunque se siguen realizando gestiones para identificar y tomar declaración a otros chicos que, según los primeros, también eran habituales de la vivienda de M.G.B y de quienes se sospecha que podrían haber tomado parte en los mismos hechos.
La denuncia ha causado gran sorpresa y conmoción en ámbitos policiales y judiciales de Murcia, debido a lo anómalo que es que una mujer se vea inmersa en un supuesto de corrupción y abusos sexuales a menores, un delito sobre el cual la experiencia señala que está prácticamente circunscrito a varones.
07.04.10 - 00:44 -
RICARDO FERNÁNDEZ MURCIA.
La pérdida de su esposo en un accidente de motocicleta no le impidió seguir haciendo lo mismo que antes, como mantener relaciones sexuales y consumir hachís, marihuana y cocaína, aunque en su nueva vida los elegidos eran niños menores de edad. Una vecina de Murcia, cuya identidad responde a las iniciales M.G.B., ha sido ingresada en prisión como sospechosa de abusos sexuales y corrupción de menores, así como de un delito contra la salud pública, al existir datos que apuntan a que les facilitó y les indujo a consumir sustancias estupefacientes.
Fuentes próximas al caso han confirmado a 'La Verdad' que la investigación, que ha acabado con M.G.B. encarcelada, se inició el pasado marzo, después de que la madre de uno de los menores de edad se enterara de lo que estaba ocurriendo y presentara una denuncia ante el Cuerpo Nacional de Policía. Los agentes del Servicio de Atención a la Familia (SAF) no tardaron en localizar a un grupo de menores de edad, todos ellos varones de entre 12 y 15 años de edad, que se habrían visto inmersos en ese tipo de prácticas y, tras tomarles testimonio y confirmar que todos los datos apuntaban a que la denuncia tenía una base firme, procedieron a detener a la sospechosa.
Según las fuentes mencionadas, la mujer sólo reconoció haber mantenido una relación de amistad con estos menores, cuya presencia en su domicilio era muy habitual, y rechazó tajantemente haberles facilitado drogas o haberles animado a consumirlas, así como haber tenido relaciones sexuales con alguno de ellos. Pese a insistir en que era inocente de los hechos que se le imputaban, el juez de guardia consideró que los indicios en su contra eran numerosos y especialmente graves y ordenó su ingreso en prisión preventiva, situación en la que se encuentra a día de hoy.
Les pedía que llevaran 'coca'
Básicamente, los hechos que se le atribuyen a este vecina de Murcia son, según las fuentes mencionadas, haber tenido relaciones sexuales completas con un niño de 14 años, hijo de un matrimonio de su mismo edificio, así como de haber inducido a éste y a otros menores a consumir varios tipos de drogas, como hachís, marihuana y cocaína, tanto esnifada como fumada. Incluso se investiga si la mujer habría pedido a varios de estos menores que la acompañaran en sus desplazamientos a uno de sus habituales puntos de aprovisionamiento de drogas, el bloque 3 de la calle Santa Rita, en el barrio murciano de La Fama, así como de haber animado a otro de los menores a que llevara cocaína a casas. Este chico la conseguía supuestamente robándosela a su tío, consumidor de ese estupefaciente, o de un vecino, a quien habría extorsionado -lo amenazaba con contar a la Policía que era un traficante- para que le diera la droga.
Siempre según las mismas fuentes, los agentes del SAF habrían localizado incluso varias fotos que los menores habían colgado en la red social Tuenti y en las que puede vérseles consumiendo lo que, según ha reconocido ya alguno de ellos, era un porro de hachís. Hasta el momento, tanto la Policía como el juzgado que instruye las diligencias han localizado e interrogado a cinco menores que habrían sido víctimas de estas prácticas, aunque se siguen realizando gestiones para identificar y tomar declaración a otros chicos que, según los primeros, también eran habituales de la vivienda de M.G.B y de quienes se sospecha que podrían haber tomado parte en los mismos hechos.
La denuncia ha causado gran sorpresa y conmoción en ámbitos policiales y judiciales de Murcia, debido a lo anómalo que es que una mujer se vea inmersa en un supuesto de corrupción y abusos sexuales a menores, un delito sobre el cual la experiencia señala que está prácticamente circunscrito a varones.
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